Inglaterra no ha construido Europa. Ningún líder británico ha estado al frente de las ideas que han hecho posible la Unión Europea. Pero ante la ausencia de liderazgo en el continente, Tony Blair se levanta como un estadista que tiene ideas, que las expone y las defiende ante un Parlamento Europeo que le recibió con una sutil hostilidad.
Blair ha propuesto la modernización de la Unión. No pide mirar hacia el pasado sino construir el futuro. No es posible, dice, que la juventud europea no entienda las ventajas de pertenecer a una espacio de paz, progreso y solidaridad.
Hace falta que lo que dice conecte con la sociedad. Que el formidable discurso pronunciado hoy llegue a las instituciones y a la sociedad europea.
Blair ha marcado un nuevo ritmo y una nueva visión. Optimista y realista. Moderna.
Qué abismo se levanta entre Blair y Chirac, Schröder, Berlusconi y Zapatero.