Las nuevas sanciones económicas contra Irán fueron aprobadas por el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas por 12 votos a favor, 2 en contra y una abstención. Se impone un embargo parcial de armas, un sistema de inspección de los buques iraníes y medidas contra las empresas relacionadas con la Guardia Revolucionaria iraní.
Estados Unidos consiguió la aprobación del resto de cuatro miembros permanentes del Consejo de Seguridad –China, Rusia, Francia y Gran Bretaña – pero no consiguió que Turquía y Brasil votaran a favor o se abstuvieran de la resolución como miembros rotatorios del Consejo.
Esta resolución se produce tres semanas después que Irán estableciera una alianza con Turquía y Brasil para el desarrollo de la energía nuclear del régimen de los ayatollahs de Teherán. Pasamos del mundo bipolar de la guerra fría al unipolarismo de los años noventa y comienzos de este siglo para llegar al multipolarismo que el propio presidente Obama ha admitido después de haber llegado a la Casa Blanca.
Estados Unidos ya no es la potencia imprescindible que proclamaba Magdalene Albright en los tiempos de Clinton. El Consejo permanente de Seguridad no representa todo el poder real en el mundo. Faltan India, Brasil y otras fuerzas emergentes que piden voz y voto permanentes en el Consejo de Seguridad de la ONU. Brasil surge con fuerza en América Latina sin seguir necesariamente las pautas y exigencias de Washington.
Turquía ha optado por ser el poder decisivo en Oriente Medio, es miembro de la OTAN y aspira a ingresar en la Unión Europea que le da largas sin comprometerse a reconocerla como miembro. No es casualidad que Brasil y Turquía hayan establecido un pacto con Irán. Este gesto lanza el mensaje de que hay otros círculos de poder que no se encuentran en el Consejo de Seguridad.
El conflicto entre Turquía e Israel, a raíz del asalto del buque de cooperantes que se dirigían a Gaza con el resultado de nueve turcos muertos, puede lanzar a Turquía a un alejamiento político de Europa y a jugar sus bazas en la región, rememorando quizás el papel que los otomanos tuvieron durante siglos en Oriente. Me parecen impropias las declaraciones del secretario de Defensa, Robert Gates, culpando a Europa del acercamiento de Turquía a Irán al no aceptarla como miembro de la Unión Europea. Es mucho más complejo.
El tablero de ajedrez en el mundo se ha movido. Estados Unidos sigue siendo la gran potencia pero no puede prescindir de China, Rusia, India, Japón y Europa. Los países emergentes piden estar en el centro de decisiones. La votación en el Consejo de Seguridad lo demuestra.
Artículo publicado en La Vanguardia.es el 9 de mayo de 2010
El tablero que antes de la caida del muro y todo lo demas era de dos colores, ahora se ha cuarteado con mezclas insolitas incontroladas e incontrolables.
Los «ganadores» nos han llevado a una crisis salvaje.
Estos ganadores ahora quieren poner orden en un caos que ellos han provocado con su codicia, sus mentiras, su hipocresia y su cinismo.
dogbert, estoy de acuerdo contigo. Has expresado exactamente y con pocas palabras, la realidad de los hechos.
Sr.Foix: Me parece que Irán pagará alguno de los platos rotos de esta crisis…