Tiene razón Mourinho. Al Barça le gusta el teatro. Tanto es así que Pep Guadiola se fue a ver Agost, la obra que se representa en el Teatre Nacional de Catalunya, mientras el Madrid dejaba tres puntos ante un Osasuna que doblegaba la galaxia blanca. Esta vez el portugués no culpó a nadie de su segunda derrota en la Liga. Ni al árbitro, ni al público, ni a Valdano, ni a Benzema, ni al reclamado 9 que saltó al césped en el minuto 65 bajo el nombre de Adebayor. Se fue tranquilo del Reyno de Navarra porque sus jugadores lucharon hasta el final e hicieron su trabajo con dignidad.
Este no es el Mourinho que levanta titulares cada vez que abre la boca. La Liga no está sentenciada y la historia de las remontadas es bien conocida. Pero mientras Mou aceptaba la realidad de los siete puntos por detrás del Barça, Guardiola estaba en el teatro. Sospecho que pretendía ir de incógnito para no dar una sensación de relajamiento. Pero hoy se sabe todo, siempre se sabe todo, y el teatro no es el espacio idóneo para pasar desapercibido.
Horas después de la sesión, el mensaje llegaba a los jugadores. Siete puntos no son nada cuando queda tanta Liga. Así lo repitieron los jugadores a partir de ayer y así van a desplazarse mañana a Almería como si fuera una final. A Guardiola puede gustarle el teatro pero no lo hace. Su sobriedad retórica no la interpreto como una táctica estudiada sino como la precaución necesaria para no comerse osos antes de cazarlos.
Sabe, sabemos los barcelonistas, que los títulos no se ganan con palabras ni gestos sino con el respeto al adversario y con la suerte que sonríe a quienes la tuercen a su favor con trabajo, disciplina y buen humor en el vestuario.
Publicado en El Mundo Deportivo el 1-2-2011
Mérito de Guardiola y del equipo. Todos actuan como un solo hombre y además son humildes.
Guardiola es un sabio, sobrio inteligente y humilde. Pero está respaldado por jugadores humildes e inteligentes que le secundan. Todos los jugadores incluido Guardiola forman una unidad humilde de ataque para ganar y solo ganar.
Eh ahí el mérito. Trabajar unidos con humildad y acción efectiva como un solo hombre.
Ojalá los politicos actuaran de esta manera como el equipo del Barça actual. Y otro gallo nos cantara.
Albert, no te olvides de «rocambole», «de luxe», «lionel richi»,»riki martin» y tantos alias falsos que nos han molestado ultimamente, son el mismo perro con distintos collares.
Un saludo,Julia.
Julia, no se a que se refiere con la respuesta donde alude a mi persona. Yo solo he hecho un comentario en este blog referido a una opionión, a mi juicio machista, sobre el físico de las políticas catalanas.Revise el archivo y lo comprobará. Por cierto, acabo de llegar y no sé quienes son los otros alias. Un saludo.
¡¡¡Vaya por dios, acabas de llegar!!!.
Vaya siglo que estamos pasando los cules!!! Y vaya estilazo ya no tan solo de juego, sino de actitud, de elegancia, de grupo top, de futuro.
Visca!!!
Como dice el refrán: «Hasta el rabo, todo es toro». Guardiola es un empírico además del mejor entrenador del mundo.