Hosni Mubarak no pudo detener la revolución y ha cedido al clamor de millones de egipcios que exigían su dimisión a lo largo de 18 días de manifestaciones. Ha entregado el poder al Ejército y, como es ritual en la caída de todos los dictadores, sus cuentas corrientes en Suiza han sido congeladas. Egipto sigue en manos del Ejército y el nuevo presidente es el ministro de Defensa, Hussein Tantawi, que ha desplazado al vicepresidente Omar Suleiman.
El júbilo de cientos de miles de egipcios lo están contemplando en directo en todo el mundo. Lo que parecía improbable durante 30 años se ha producido en 18 días. El Ejército se ha encontrado en medio de un pulso entre los manifestantes sin líderes y un presidente octogenario que no quería abandonar el cargo. La ocupación de las calles de las ciudades ha tenido más fuerza que los mensajes de Mubarak.
El Ejército no se ha enfrentado a los manifestantes y, finalmente, tampoco se ha puesto a las órdenes del dimitido presidente. La vieja guardia, según parece, insistía en la permanencia de Mubarak pero los jóvenes oficiales ya no le apoyaban y simpatizaron con los manifestantes. Es prematuro analizar la situación de Egipto que está fluyendo con la rapidez que se desarrollan los hechos en una revolución.
El Ejército tendrá en sus manos la posibilidad de conducir una transición creíble y democrática. Así se lo ha pedido el presidente Obama en su primer mensaje después de la dimisión de Mubarak. Hoy ha terminado un ciclo que empezó en 1952 cuando los generales veteranos estaban con la monarquía del Rey Faruk mientras los jóvenes, con Gamal Abdel Nasser al frente, propiciaron un golpe de estado contra el viejo sistema.
Nasser se subió al carro del nacionalismo árabe, pactó con la Unión Soviética y cerró el canal de Suez. En 1956, los gobiernos de Francia y Gran Bretaña se estrellaron en una expedición precipitada para recuperar Suez que se convirtió en una frustración cuando el presidente Eisenhower se desentendió de la aventura naval.
Tres presidentes en 60 años –Nasser, Sadat y Mubarak– habían construido un régimen controlado por el Ejército. Con la importante ayuda de Estados Unidos que convirtió a Egipto en el segundo país más subvencionado, después de Israel, asegurando una cierta estabilidad en la región. Todos los presidentes americanos y todos los líderes europeos han sostenido de diversas maneras a los regímenes dictatoriales árabes. Eran el mal menor.
Lo que ha caído hoy es el sistema panarabista de Nasser, medio militar y medio socialista, una dictadura que renovaba su fuerza con una eficaz policía secreta que perseguía, encarcelaba y eliminaba a cuantos se oponían al sistema.
A pesar del júbilo de los egipcios y de millones de personas en el mundo que creen en la dignidad y la libertad de las personas, lo cierto es que el Ejército es el que va a conducir el país hasta las elecciones próximas. Los militares pueden inclinarse por una democracia parlamentaria abierta y quedarse en un segundo plano comprometiéndose a que se cumpla la nueva Constitución.
También pueden optar por una solución a la turca en la que los militares han sido hasta hoy una pieza clave para controlar el poder político. Es una tentación a la que pueden sucumbir para no tener que rendir cuentas de los abusos cometidos por el Ejército en los últimos 30 años.
Aunque es improbable por ahora, tampoco hay que descartar una solución de corte iraní si los Hermanos Musulmanes decidieran radicalizar su discurso y convertir la república egipcia en una república islámica. Esta última posibilidad es improbable si se tiene en cuenta que Egipto, con mayoría sunita, ha tenido una dictadura secular, parecida a la del Iraq de Saddam Hussein y a la de Siria de los Assad.
Es hora de festejar la fiesta de la libertad en Egipto. Pero hay que estar atentos a los movimientos del Ejército, a las reacciones de Israel, de las monarquías autárquicas del Golfo, a la posición de Obama y también de la Unión Europea. Egipto es el centro de gravedad para mantener una cierta estabilidad en la región.
Hoy ha sido un día histórico. El futuro lo tienen que inventar los egipcios.
Los EEUU enviaron a Frank Wisner, ex embajador y amigo personal de Mubarak, a comunicarle que ya pasó su cuarto de hora y que tras sopesar el costo político de mantener a su aliado, han terminado por convencerse de que su estrategia regional puede ser mejor servida por una limitada “apertura democrática”. El imperialismo, a fin de cuentas, no tiene amigos sino intereses. La necesidad de impulsar esta “apertura democrática” de manera controlada desde Washington ha sido enfatizada por diversos estadistas occidentales que han llamado a una transición “ordenada”, eufemismo utilizado para decir queremos que las cosas cambien cosméticamente, para que nada cambie en realidad.
Pero Obama necesita un exito, para limpie su imagen de Usa, despues del fenómeno WL.
Un plan Marshall en un Egipto democrático seria un éxito en la zona que reforzaría su posición.
A pesar de todo lo que podamos pensar de Usa y «sus maneras» es mucho mejor un Egipto tutelado que un Egipto caótico.
Aun seria mejor un Egipto tutelada por una ONU o institución similiar, pero como no se quiere crear….asi seguimos. Intereses x intereses particulares de pais y no intereses globales.
Sr. Foix el panarabismo murío con Nasser. Sadat desmanteló todas las refomras sociales nasseristas y se acercó a occidente, Mubarak lo enfatizó. Lo única semejanza con Nasser que se mantenía con Mubarak era el partido único, que no era mismo sino una creación de Sadat formada a través de los centristas de la Unión Socialista Árabe. Y el papel del ejército, que son los que ahora detentan en solitario el poder, sigue siendo el mismo desde Nasser.
De momento estan mejor que ayer que ya es mucho.
Nunca hay que despreciar la voluntad de los jovenes, jovenes mucho mas preparados de lo que nos imaginamos.
como ya se comento en otro articulo:
«No dudemos jamás de la capacidad de tan solo un grupo de ciudadanos conscientes y comprometidos para cambiar el mundo. De hecho, siempre ha sido así» (Margaret Mead, activista social)
españa es uno de los paises que pueden resultar mas afectados por un hipotetico corte del transito por el canal de Suez en Egipto.
Y ahora movida en Argelia. Argelia puede ser un tema mucho mas violento y en este tema la UE puede verse metida de lleno. Desde Argelia a las españas llega mucho suministro energetico. Francia tiene mucho en el meollo argelino y alli si que los islamistas ya han tomado la delantera en las manifestaciones. En Italia ya en Europa las protestas contra el payaso que pñreside el pais estan en marcha. Creo que el asunto nos va a «remover» a todos. A ver si despertamos tambien, que ya esta bien de guiñol, el sur de europa esta en lista de espera.
Sr. Foix: También soy de la opinion de BartoloméC. De hecho los egipcios aún no han conseguido la libertad y tampocola democracia.
Pues para las clases de ciudadanos egipcios que han sufrido la dictadura con sus abusos, humillaciones, martirios, encarcelamientos, privaciones, desempleo, escaces y hambre aún están igual y con miedo al futuro gobierno mandatario.
De hecho estos ciudadanos están a la expectativa porque el poder aún está en su máximo esplendor y potencia. De ahí la aparente calma y paz.
Es evidente que algo ha cambiado. Pero con solo hechar a un solo hombre dictador y cabeza visible de la nación no quiere decir que el resto de todo el bloque de personas que le secundan y apoyaban también se hayan ido.
Están ahí y son omnipresentes y detentan el poder absoluto. No existe una oposición con poder suficiente para ocupar el puesto de gobernar con garantias de paz y democracia. Porque la dictadura se había encargado de eliminarlos ó encarcelarlos.
Lo de ahora es un principio pero para que alcancen la democracia y la libertad aún falta bastante tiempo.
El asunto es que estan en ello y han dado un primer y muy importante paso.
Y las tropas «pacificadoras» tienen que abrirse pero ya de Iraq, Afganistan y demas intromisiones en los que estan por motivos espureos. Menos paternalismo hipocrita y menos mentiras.
Tonterias y bromitas las justas, o sease ni una mas.
Pues con todas esas potencias que enumera el Sr. Foix pendientes de Egipto y que no han podido parar el empuje y la decisión de millones de personas, insisto pacíficas, que con su solo ejemplo son ya referente para otros muchos millones más, lo que siento es un júbilo sin asomo de miedo al futuro. Creo que desde el primer mundín hay un discurso paternalista frente a movimientos frescos, jóvenes y diferentes. Yo estoy hoy por hoy y sin reservas con esta revolución. Los caminos están para ser andados. Ahora hay uno precioso en Egipto. No elucubremos con una población que ha demostrado más madurez, compromiso y autenticidad que cualquiera a este lado y el otro del mediterráneo y eso que estaban en condiciones muy precarias. Es para estar contentos y atentos a ellos sobretodo.
Y un apunte Sr. Foix: No se preocupe tanto por el Estado de Israel, que al final parece que nos quiera hacer creer que la situacion hasta hace unos dias de toda la region era para salvaguardar a Israel. Seamos serios y no mezclemos churras con merinas, ni queramos confundir a la gente y las cosas. A Israel le ira fenomenal con una region aireada y oxigenada por la libertad en la que pueda negociar con los dintintos estados y con sus gobiernos construidos a partir del nuevo orden, sea este el que sea.
No vayamos dando la nota, que prou feina tenim per aclarirnos nosaltres.
Y una vez más la UE ha hecho el triste papel de convidado de piedra en la escena internacional, con su ministra de exteriores, Catherine Ashton, personificando a Don Tancredo.
OK Brian, la UE va de don Tancredo de forma patetica.
Ayer dia 10 el Sr. Foix titulaba «Mubarak quiere detener la revolucion» y hoy Mubarak ya ha volado y el Sr. Foix nos dice que el ejercito tiene el poder en Egipto.
La velocidad del asunto ha sido tremenda y la cogida a contrapie de estadistas, periodistas y malabaristas es digno de estudio.
Afortunadamente estas cosas reconcilian con el sentir de que todo es posible.
El lumbreras del Obama dice que la transicion no ha terminado sino que ha empezado. Este razonamiento rejustifica la memez de haberle dado un Nobel a esta promesa que se desinfla por dias.
El mundo arabe y el mundo oprimido en general no tienen que parar en esta magnifica espiral hacia la libertad.
Y los que nos creemos instalados en el primer mundo, tampoco tenemos que parar en alentar toda esta magnifica movida.
El gobierno del reino (reino) de españa se ha quedado a cuadros y veremos como movemos los seculares lazos de amistad con los paises arabes y toda esta cantada cutre que oimos desde tiempos del innombrable.
Jordania, Siria y porque no Marruecos pueden estar en lista de espera, ya veremos como acaban nuestras plazas de «soberania» en el norte de Africa, expresion de la mas rancia y corrupta colonizacion.
Sr.Foix: Yo aún diría más, el ejército «sigue» teniendo el poder en Egipto…
Bartolome, el ejercito nunca ha dejado de tener el poder, lo que cambia es la cara del dictador, pero poco mas.
El ejército ha mostrado su verdadero rostro al decir a los manifestantes que sus demandas ya habían sido escuchadas y que es hora de volver a la normalidad -¡como si el pueblo egipcio hubiera puesto 300 muertos solamente para que se le escuche!