A un señor grave y bonachón, con una biografía futbolística espectacular como la de Vicente del Bosque, no se le revolotea el gallinero del vestuario por muchas que hayan sido las riñas y palabras gruesas que se hayan cruzado los jugadores seleccionados. El alud de clásicos recientes, seis en tres meses, han provocado rifirrafes feos entre jugadores del Barça y del Madrid. Todo ha sido convenientemente aderezado por las salidas de pata de Mourinho, con meteduras del dedo en ojo ajeno, rabietas y palabras que demostraron el mal perder del entrenador portugués.
Tuvieron que hablar Casillas, Xavi, Cesc y otros para aclarar que la rivalidad tan radical entre Barça y Madrid no tiene nada que ver con el comportamiento humano y la caballerosidad y fair play de la mayoría de sus jugadores. El trasfondo de este falso conflicto es la incapacidad de cierta prensa y opinión públicas madridistas en admitir que el Barça de Guardiola es superior en estilo y eficacia al Madrid de Mourinho. Pero si no saben ya qué inventarse. Iniesta y Cesc remontaron un 0-2 con el Chile de Alexis. Uno de los rasgos de este Barça es el del trabajo y la seriedad, el respeto al adversario grande o pequeño, el medir bien los gestos y las palabras. Así también se contribuye a ganar títulos. Alexis, por favor, no te quites más la camiseta cuando marques un gol. Esto no se lleva ya.
Es inevitable la bronca mediática, en un sentido o en otro, pero lo que de verdad importa es el lenguaje que se habla en el campo y el convertir cada encuentro en el más importante de todos. No ha habido choque de trenes en la selección y los jugadores tendrían que contener sus emociones y pasiones. Son profesionales.
Publicado en El Mundo Deportivo el 6-9-2011
Sr. Foix, ojala en Madrid lo vieran tan claro.
Amic Lluis: PAU i BÉ. Si fos una comunitat cristiana jo els hi aplicaria el mètiode evang«elic de Jesús del Diumenge passat: No vulguis treure la petita brossa de l’ull del teu germà, quan tu hi portes un troncs…que no et deixa veure els teus defectes. Segur que Vicente del Bosque coneix aquest text i els hi ha aplicat l’autocrítica…es a dir la correcció mútua o fraterna. Totes les comunitats, grups i families anirien millor si s’ho apliquessin. Li poso aquest testimoni d’Anthony de Mello: NO CAMBIES, TE QUIERO
Durante años fui neurótico. Era un ser angustiado, deprimido y egoista. Y todo el mundo insistía en decirme que cambiara. Y no dejaban de recordarme lo neurótico que yo era. Y yo me ofendía, aunque estaba de acuerdo con ellos, y deseaba cambiar, pero no me convencía de la necesidad de hacerlo, por mucho que lo intentara. Lo peor era que mi mejor amigo tampoco dejaba de recordarme lo neurótico que yo estaba. Y también insistía en la necesidad de que yo cambiara. Y también él estaba de acuerdo, aunque tampoco podía impedir ofenderme con él. De manera que me sentía impotente y como atrapado. Pero un día me dijo: “ No cambies, sigue siendo tal como eres. En realidad no inporta que cambies o que dejes de cambiar. Yo te quiero tal como eres y no puedo dejar de quererte” Aquellas palabras sonaron en mis oidos com música: “No cambies. No cambies. No cambies…Te quiero”. Entonces me tranquilicé. Y me sentí vivo. Y, ¡oh maravilla! Cambié. Anthony de Mello.
Una forta abraçada. Josep
Sr.Foix: Si hubiera o hubiese algun problema en la selección se fabrica en dos días un nuevo artículo en la Constitución prohibiendo los malos rollos y asunto solucionado…