Al final de temporada asistí a un encuentro en Stamford Bridge entre el Chelsea y el Tottenham. Acompañaba al corresponsal que más partidos de fútbol ha visto en directo en la historia. Rafael Ramos invierte mucho de su tiempo libre en ir a la ópera y en ver partidos de fútbol, una mezcla que le convierte en especialista en dos cuestiones tan distintas y distantes. Rafael Ramos te puede dar una teórica de Verdi o una lección sociológica sobre el fútbol londinense.
Me indicó la costumbre de que los seguidores visitantes a los estadios de clubs ingleses eran tan numerosos porque forma parte de la rivalidad, la atmósfera y el espíritu deportivo entre aficiones que se odian fraternalmente. Mientras observábamos el universo azul del Chelsea pensé en la imposibilidad de trasladar estas costumbres a nuestros estadios. Solemos ver al adversario como enemigo mortal. Puede que no haya más remedio. Pero al leer la prensa de Barcelona y la de Madrid debería mediar un punto de acuerdo en el que la realidad se pudiera por lo menos vislumbrar. Esta incompatibilidad se ha agudizado en los últimos tiempos en los que el Madrid de Florentino quiere desbancar sí o sí la hegemonía del Barça de Guardiola. La fuerza y la petulancia de Cristiano se exhibieron en Anoeta con profusión. El portugués no marcó pero se enfrentó con el público mientras mostraba sus hercúleas extremidades como si fuera el entrenador de un gimnasio de Pedralbes. Todo en este Madrid parece destinado a situar al Madrid en el centro del destino universal futbolístico.
Habrá que permitir que ganen algo más que una Copa para que se tranquilicen un poco. Habían sentenciado que el ciclo Guardiola y Messi había llegado a su fin. No sé a qué vienen tantas prisas. Habrá que esperar más tiempo de lo que quisieran Mourinho, Florentino y Ronaldo.
Publicado en El Mundo Deportivo el 1-11-2011
Sr.Foix: Rafael Ramos es además de todo eso que Vd nos relata un extraordinario escritor, un novelista de primera; tenemos corresponsales en el extranjero que deberían ser consultados por cada gobierno de turno,para saber por dónde van los tiros y no dar tantos palos de ciego como damos. Sobre Florentino lo único que le puedo decir es que necesita títulos como el respirar, sin ellos no podrá dar el enésimo pelotazo de su carrera, esa y no otra es la urgencía que tiene…
AMIC, LLUÍS. PAU i BÉ. Avui és la Solemnitat de Tots Sants. Podem dir que en Florentino ien Mou están fent una mala digestió de la CASTANYADA. Jo els hi faria llegir com a penitència les BENAURANCES de l’Evangeli d’avui, sobre tot aquella que diu: FELIÇOS ELS QUE POSEN PAU. APALI, que dieu els lleidatans. Bona Festa. Josep