Es constante el desprecio, por no decir el hostigamiento, del poder político español a las lenguas no castellanas. El argumento es que donde se puedan entender todos en una lengua común no es necesario utilizar otros idiomas por muy protegidos que estén por las leyes donde se hablan esas lenguas y aunque sean idiomas a los que la Constitución haya dado rango de oficiales. Sería interesante que todos los políticos que en Estrasburgo, en Madrid o en Baleares niegan al catalán su derecho a ser una lengua de primera, se pasaran largas temporadas en Suiza o en Suecia donde varios idiomas conviven en las instituciones políticas y civiles.
La manifestación del domingo en Palma contra el gobierno de Bauzá que está aplicando una inexplicable regresión de la lengua que se ha hablado en Mallorca durante siglos es un signo de la vitalidad de la Obra Cultural Balear y de decenas de miles de ciudadanos que no aceptan lo que el gobierno del PP está perpetrando contra el catalán en los medios de comunicación, la administración pública y posiblemente en las escuelas.
No hay lenguas mayores y menores por grande o reducido que sea su espacio demográfico o territorial. Cuenta George Steiner que la «auténtica catástrofe de Babel no es la dispersión de lenguas, sino la reducción del habla humana a unas cuantas lenguas planetarias multinacionales». La extinción de lenguas que estamos presenciando en la actualidad -decenas de ellas pasan cada año a un silencio irremediable- es exactamente paralela a los estragos que se hacen en la fauna y la flora, pero de una forma más definitiva.
La lengua no es un capricho de unos cuantos románticos sino la expresión más clara de una manera de entender la realidad, una ventana singular abierta al mundo que añade matices y formas que enriquecen la existencia humana. En Estados Unidos y la Commonwealth británica el inglés ha pasado por encima de cientos de lenguas que sobreviven en zoológicos culturales.
Los políticos que entienden que la homogeneidad lingüística es práctica y más barata para el buen funcionamiento de las instituciones, lo deben hacer más por ignorancia que por responsabilidad cultural para preservar aquello tan valioso y tan íntimo para muchos ciudadanos. Estoy seguro que si Ramon Llull viviera hoy habría acudido a la manifestación de Palma. Llull, nacido en el siglo XIII, era una mallorquín que es considerado como uno de los credores del catalán literario.
Publicado en La Vanguardia el 27-3-2012
lull creo que era un iluminado con todos los respetos para la lengua catalana, en la sorbona hablaba el latin y cuando fue a convertir moritos a tunez el arabe, mis respetos para la personalidad del franciscano pero esto de las lenguas y las polemicas linguisticas que os traeis los catalanistas que no catalanes son tormentas in a cup of tea, el peligro es querer imponer un idioma por decreto que es lo que hace Mas y que nos revierte a las quejas de Cela de que no se puede imponer una jerga mediante el BOE pero al revés. No obstante, me gusta tu blog Foix, aunque no comparta tus ideas, que respeto, aunque seas tan anglofilo y tan ilerdense. visca la terra ferma
Estic bàsicament d’acord amb el seu article. Nomes voldria expressar que en la meva opinió no es degut solament a l’ignorància, també al instint de domini. El domini dels uns porta implícita la subordinació dels altres. Aquesta subordinació s’estén a tots els camps, el sentimental, l’econòmic….
Aquest ancestral desig de domini i el menyspreu per les cultures diverses es una de les probes de que l’espècie homo sapiens ha evolucionat molt poc . No hem adquirit consciencia d’espècie.
Si els politics tinguessin un mínim de coneixement, haurien de saber que moltes especies han desaparegut degut a la especialització. Una espècie massa especialitzada no ha aconseguit adaptar-se als canvis.
Però quan escoltes manifestacions com la del Sr Sarkozy que pretén REFUNDAR quelcom que no s’ha fundat prèviament com es el capitalisme. …………!.
Turó Parc, 1912-2012, cent anys.
Retorn al Turó Parc.
Més alts i foscos, els llorers cobreixen
els cavalls verds de bronze enmig del llac.
Quan el passat es converteix en somni
dessota els arbres que ja no existeixen,
com un luxe d’antany el parc estén
el seu color verd fosc dins els teus ulls;
tornen les pluges roses de l’estiu
damunt dels eucaliptus, i les veus
que ara esperen l’oblit. L’estany ombrívol
ha conservat els seus nenúfars,
ombres de vestits blancs en caure un vespre
com la lluna en el pit d’obscurs xiprers.
Joan Margarit
Como no hay nada mas urgente e importante, pues a darle al catalan. Es un ejercicio que practican continuamente con puntas mas visibles cuando les parece. Pero no se saldran con la suya, con esto no y no tan solo por una cuestion de resistencia, es que es ir contra natura.
Dicho esto, tambien hay que decir que no hay que entrar al trapo continuamente en unas maniobras de despiste de una y otra parte de lo que de verdad escuece que es el dia a dia de este tiempo tan crudo en el que estamos.
Hay que pasar de provocaciones, gastar el minimo de energia en estos temas y ser listos e inteligenes y entender que no podran parar el fluir de una lengua, de una manera de comunicarse, de entenderse en una actitud acogedora y nunca excluyente.
Fent «sa mili» a Palma a finals dels seixanta del segle passat vaig poder rebre les primeres clases a la meva vida de llengüa catalana al Ramon Llull. Resten encara un bon grapat d’amics d’aleshores amb els que faig vehement pinya
Ho he llegit a La Vanguardia. Visca Ramon Llull, (franciscà), al davant de la Manifestació. Una abraçada; PAU i BÉ. Josep
Atentar contra la lengua catalana es ir en contra de la paz, la convivencia y de la unidad de España.
El catalan es la primera lengua latina. Y el español es lengua latina pero el español tiene más de 4000 palabras de arabe.
En lugar de meterse con la lengua catalana deberían dedicarse a dar ideas para crear empleo a los millones de parados.
Al principio de la transición el catalanismo político se lanzó, con euforia e ingenuidad a partes iguales, a pregonar la idea de «els Països Catalans». Esto fue recibido desde Valencia (y no solo por los sectores más españolistas, que allí abundan) como una injerencia, cuando no como un agravio. Treinta y cinco años después las heridas no han cicatrizado y las reticencias se han cronificado. Si aprender de la experiencia sirve para algo, cosa que desgraciadamente no siempre ocurre, deberíamos evitar cometer el mismo error con Las Islas. Ellos sabrán cuan dispuestos están a mantener vivo el catalán –que es tan suyo como nuestro– y hasta que punto están dispuestos a luchar por ello.
No puedo estar de acuerdo, Brian. Podemos dejar de lado «els Països Catalans», pero los hablantes de una lengua tienen todo el derecho a apoyar a otros hablantes si pierden derechos; los catalanes pueden apoyar a los baleares, los valencianos a un norcatalán o un alguerés a alguien de la Franja. Quien se preocupa por la lengua, aceptará la ayuda y quien la quiere destruir, la criticará. Lo importante, al final, es saber de qué lado se está.
Los valencianos están muy contentos en dar briza a los catalanes, en un ejercicio que delata su estupidez y cretinismo, pues el catalán es su lengua propia y no el castellano. Y serán los valencianos quienes reciban su «premio», sus escupitajos les caen encima.
Sr.Foix: Lo peor es todo lo que se esconde tras esa regresión de la lengua catalana.