Lo más relevante es que haya sido juzgado un ex primer ministro de Islandia como responsable de la bancarrota que ese país de 320.000 habitantes sufrió en 2008. Geir Haarde, primer ministro desde 2006 a 2009, podía haber sido condenado a dos años de cárcel por negligencia política.
El ex primer ministro sólo fue condenado por un delito menor por no haber tratado en las reuniones del Consejo de Ministros las cuestiones que hundieron la economía y las finanzas del país. No hay pena de cárcel ni tampoco tendrá que pagar las costas del juicio que irán a cargo del estado islandés.
Al terminar el juicio y conocerse la sentencia absolutoria Geir Haarde hizo unas reflexiones interesantes. Si a él se le ha llevado a los tribunales qué tendría que haberse hecho con tantos presidentes de gobierno que han visto como el sistema financiero se desplomaba sin que nadie se responsabilizara de ello. Es lógico y humano equivocarse. Hasta el Rey de España lo reconoce y dice que no volverá a ocurrir.
Los gobernantes pueden equivocarse y se van a equivocar muchas veces. Pero sería conveniente que supieran que las urnas no lo curan todo y que si ha habido negligencia alguna responsabilidad tendrían que tener.
Los tres principales bancos de Islandia habían alcanzado un volumen diez veces superior al PIB de la isla. En octubre de 2008, con la quiebra de Lehman & Brothers, los tres bancos islandeses se declararon en bancarrota y el país en la miseria. La ayuda del Fondo Monetario Internacional para pagar las deudas a bancos holandeses y británicos fue imprescindible.
Hubo elecciones y los socialdemócratas y verdes barrieron al partido conservador que representaba Haarde. La situación se ha enderezado un poco y la crisis se está superando.
El Tribunal que juzgó al ex primer ministro se creó en 1905 y nunca había actuado. Ahora lo ha hecho aunque sea para dejar constancia que la impunidad no existe tampoco en política cuando los errores son de dimensiones mayores.
Ya hubo un juicio político que se dirimió en las urnas, y así el partido en el gobierno palmó. EL hecho de que se pidan responsabilidades por negligencias que han repercutido en terceros (la población islandesa) en otra instancia judicial está muy bien. Aunque el resultado es el que conocemos al menos existe la realidad de que un gobierno puede tener que sentarse en el banquillo y que ese concepto tan absolutamente casposo de la inmunidad deje de ser colchón de agua y plumas para cualquier descerebrado o estafador alzado al poder por las urnas. Que se sepa que no hay impunidad para nadie ayudaría a que los responsables se supieran objeto de control en sus desmanes.
Aquí por ejemplo, vendría muy bien para estos que están sacando decretos leyes de largo recorrido como churros. Y lo peor es que se les ve el despiste y el descontrol en la mirada.
Islandia tiene 350.000 habitantes, estan muy apiñaditos y se coonocen todos, tampoco la cosa estaba en hacerle un feo al ex primer Haarde que luego te lo encuentras haciendo brazadas en un geiser cualquiera y te amargas el picnic.
Aun asi el precedente esta bien.
El «modelo» islandes del tratamiento de la crisis parece que no es exportable, porque los lumbreras de por aqui ni lo mentan como posible salida a nuestro galimatias.
Tenemos el pais en venta a precio de saldo, las bolsas en un tobogan y la prima de riesgo en la estratosfera, pero seguimos erre que erre hacia la inanicion.
Veremos mañana con el Chelsea y sigamos orando para que sant Pep Guardiola renueve. Poco pan y pesimo circo.
Si, mucho juicio en Islandia, pero se ha ido de rositas el primer ministro, para eso que no hagan nada.
No conozco lo suficiente del asunto de Islandia para dar una opinión mínimamente fundada, pero este juicio puede ser un primer paso (como lo fue la encausación de Pinochet por parte de Garzón) para achicar espacios de impunidad.
El paradigma de la desfachatez en la elusión de responsabilidad política lo protagonizó el ex-presidente de Castilla La Mancha cuando, después de dejar la comunidad en bancarrota se justificó: «yo no soy contable, yo soy político» (Por cierto, el PSOE lo premió con un escaño en el Congreso).
La crisis ecómica de Islandia se superará gracias a los chinos, y eso planteará otra crisis.
Sr.Foix: Pedir responsabilidades por el fiasco económico que estamos viviendo y padeciendo ya lo hemos hecho los ciudadanos, otra cosa es que alguna instancia judicial o institucional, recoja el guante. No espero gran cosa al respecto, el nivel de responsabilidades es tan grande y abarca tantos y tan diversos frentes institucionales, bancarios y financieros, que una limpieza de este tipo sólo ha sido posible historicamente con una revolución social. Urgen medidas que sean capaces de generar ilusión y riqueza, sobran medidas encaminadas al pago del desfalco financiero y del despilfarro…
Eso mismo digo yo, el dinero que no se vaya para pagar a los ladrones que nos han robado, que se invierta en crear empleo y empresas, que esto es el mundo al revés.
Empleo y empresas? me suena, pero como a antiguo.