Catalunya ha sido el centro de gravedad de la política española en los casi dos últimos dos siglos. Para lo bueno y para lo malo. El “problema catalán” ocupó buena parte de los debates de la II República, antes, durante y después de la aprobación del Estatut de Núria en 1932.
Los debates fueron acalorados en las Cortes, en la prensa, en las tertulias y en las conversaciones ordinarias de las gentes. El 6 de octubre de 1934 fue una rebelión contra la República que acabó en pocas horas con la detención del president Lluís Companys y de su gobierno que no recuperaron la libertad hasta después de las elecciones de febrero de 1936, meses antes de la rebelión militar que llevó a la guerra civil.
Previamente, la Semana Trágica en 1909 había hecho caer el gobierno de turno. Los intentos de políticos catalanes para participar y dirigir el gobierno de España no llegaron a buen puerto. Francesc Cambó no quiso abandonar su catalanismo político a cambio de presidir el gobierno que le ofrecía Alfonso XIII.
Barcelona fue la ciudad de las bombas, del anarquismo, de la alteración del orden público. Fue en Barcelona donde Miguel Primo de Ribera proclamó el Directorio en en tres días se convertiría en una dictadura que duró desde 1923 hasta 1930.
En plena guerra civil, en mayo de 1937, los comunistas se mataron entre ellos por las calles hasta alcanzar 1.500 víctimas. Los estalinistas y trotskistas resolvieron a tiros sus diferencias ideológicas y sus ambiciones de poder en las calles de Barcelona. George Orwell lo explica con todo detalle en su libro Homage to Catalonia.
Barcelona y Madrid fueron los dos últimos reductos republicanos antes de que Franco declarara el fin de la guerra, con el gobierno huido a pie por la frontera con Francia y cientos de miles de soldados y civiles huyendo en situaciones calamitosas.
La dictadura fue especialmente brutal en Catalunya con la prohibición de la lengua y la represión de cuantos empezaron a plantar cara al régimen. Els Fets del Palau desconcertaron al régimen. Jordi Pujol fue sentenciado a varios años de cárcel, dos de los cuales los cumplió en la cárcel de Zaragoza. La Assemblea de Catalunya fue el primer acto coordinado y plural en contra de la dictadura que entraba en su recta final.
La Constitución de 1978 aceptaba la singularidad catalana y en su Título VIII resarcía las humillaciones del régimen y abría la puerta a un mayor autogobierno. La España autonómica nacía de la imprescindible cooperación catalana a la transición.
Cuando las autonomías fueron reivindicando los sistemas que ya estaban establecidos en todo el Estado, Catalunya presenta un nuevo Estatut que sigue todos los requisitos previstos por las leyes derivadas de la Constitución. Es debatido en Catalunya, presentado, y aprobado en el Congreso de los Diputados, sometido a referéndum en Catalunya. Y, a continuación, el Partido Popular presenta un recurso al Tribunal Constitucional que falla a favor de recortar varios puntos importantes del Estatut.
Esta decisión fue el punto de inflexión que levantó las suspicacias y la ira de muchos catalanes que entendieron que no se podía alcanzar un nuevo entendimiento entre Catalunya y el Estado. Vino la masiva manifestación del 10 de julio de 2010 que se coronó con la del onze de setembre de 2012 que fue leída equivocadamente por el president Artur Mas que convocó elecciones pensando que todos los manifestantes se sumarían a la mayoría excepcional que pedía.
Y no fue así. La manifestación sacudió a CiU y aumentó la fuerza de Esquerra Republicana que hoy es quien sostiene al gobierno Mas sin sufrir ningún desgaste. Oriol Junqueras es quien puede aguantar a CiU en el gobierno y quien la puede echar.
La convulsión de las últimas elecciones catalanas han afectado también al PSC que dejó de ser la segunda fuerza política en el Parlament y que sufrió las mismas consecuencias negativas de la radicalización política. Los dos partidos centrales de Catalunya han sido desbordados por electores que se han situado fuera de sus clásicos ámbitos de influencia.
La crisis del PSC la intenta torear Pere Navarro un poco tarde y tomando decisiones para confirmar su liderazgo. Pidió que el Rey abdicara el día que Rubalcaba estaba batallando con Rajoy en el debate sobre el estado de la nación. No fue oportuna la declaración. Pero son muchos los catalanes y españoles que verían bien que Juan Carlos I abdicara en favor de su hijo Felipe.
Pero la votación de los diputados del PSC en contra de las instrucciones del PSOE en el Congreso sobre el derecho a decidir en Catalunya ha causado una crisis seria en el PSOE. Rubalcaba se ha deshecho de Zaragoza y ha neutralizado políticamente a Carme Chacón. Pero tendrá que rehacer las relaciones con los socialistas catalanes, imprescindibles si los socialistas quieren volver a gobernar en España.
Navarro ha votado lo que había presentado en el Parlament de Catalunya y ha pedido a Mas que lo que se votó en Madrid se vota también en Barcelona. No hay noticias de que se haga esta votación.
Parece a estas alturas que los puentes entre los gobiernos de Madrid y Catalunya están rotos. No hay voluntad de reconstruirlos. La presentación del recurso, también del PP, al Constitucional para anular la votación del Parlament de Catalunya no ha sorprendido.
Pero se ha llegado a un punto en el que será necesario entenderse porque estos gestos del gobierno de Madrid y los de Artur Mas conducen a una confrontación de la que nadie saldría victorioso.
No me cabe ninguna duda que la política catalana ha entrado en una nueva fase. Pero la política española tampoco podrá ser la misma respecto a Catalunya y respecto a la organización territorial del Estado.
Sembla que a Madrid i a Barcelona els interessa poder donar-se les culpes mutuament per dissimular altres moltes coses (corrupcions pels dos can ons) més importants de les que ens volen tenir al marge. A tots dos els va bé.
Sr Foix: El Sr. Artur Mas va ser el primer en retallar l’Estatut anant a Madrid i no ho va fer per Catalunya, el que buscava era el profit personal. El senyor Mas parla del «poble de Catalunya» però no el té en compte.
Sr. Foix: Buen resumen y buen anàlisis.
En realidad Cataluña es más pactista, dialogante y unionista que separatista. Ya busco la unión con el Reino de Aragon y más tarde se unieron con Castilla y Leon, formando la unidad de España.
Pero solamente los separadores de siempre, por un problema de intereses y deldominio del poder y no por ninguna otra cosa ó razón prohiben a los españoles y a los catalanes la unión y el dialogo.
Cataluña es vista como una Vaca que tiene 4 ubres ( 4 barras tiene su bandera nacional ) pues hala a mullirla.
Y de paso humillar la dignidad y la lengua como si no fuera importante.
El problema lo provoca la falta de respeto a la dignidad, el abuso impositivo fiscal y la intolerància.
Sr. Foix, si no m’equivoco durant els fets de maig de 1937 no van ser els comunistes que es van matar entre ells. Va ser un conflicte entre els revolucionaris CNT/FAI i POUM contra la Generalitat, PSUC i UGT entre altres.
Font: http://es.wikipedia.org/wiki/Jornadas_de_Mayo_de_1937
Navarro, con su federalismo y su transicion, y la abdicacion muestra cordura, pero llega tarde y en mal momento, en plena tormenta de crisis, esto se puede hacer antes de la crisis o despues de la crisis.
Maragall, tenia razon un partido catalan, federalista europeo, lo dijo en su momento y cuando tocaba.
Dicho esto no pertenezco a este partido pero si puedo defender a personas con sentido común sean del partido que sean.
I avui va el madriz ens plantifica un 2-1. Ni ponts ni res de res, aixo fot una cantada sensacional a reocupacio de Catalunya per les españas i a mes van guanyan.
Els madelman dels mossos no en fan ni una i es la guardia civil i la nacional de «toda la vida» que ens esta treien kk a base de be.
Direm que tal, cual o pascual, pero la kk es real o no?
A mes ja tenim un altre serial de mes restaurants i mes escoltas i mes kk de galliner.
Quina cuaresma! xD
Sr. Foix:
Com sempre vostè ens fa un magnífic resum del que ha estat i cap a on anem amb el tema del «problema català» com diuen a Madrid.
I «l’encaix de Catalunya a Espanya» com diem per aquí.
Miri el tema és que per negociar i parlar, i pactar cal que les dues parts vulguin. Jo sincerament no veig aquesta recepció en el partit polític que ostenta el poder a la Moncloa.
A Catalunya hi ha independentistes però també és cert que a Espanya hi ha separadors.
Les reaccions viscerals de molts polítics del PSOE aquests dies respecte dels seus companys del PSC demostra el difícil del diàleg.
El president Mas té davant seu molt difícil el diàleg i la negociació amb el president Rajoy.
El soroll de l’entorn de Madrid ho fan molt difícil per no dir impossible.
Com no ajudi la UE amb una mediació anem a un xoc de trens.
Hi ha molts espanyols que tenen molt ficat en la seva ment allò de que Espanya és nostra, i abans vermella que trencada.
Catalunya serà el que vulguin els catalans.
Però jo espero que anem units en aquest procés iniciat.
Es pot ser de dretes, d’esquerres, republicà, nacionalista,…
El que no es pot ser és cec, ni mut que als catalans (que treballen, i paguen els seus impostos) això d’Espanya ens surt molt car econòmicament parlant.
Sr. Foix, un magnífic anàlisis de la situació Catalunya-Espanya. La historia ens mostra clarament que l’encaix no es possible. Perquè insistir mes? Siguem pràctics i no perdem mes energies. Anem decididament cap a la separació amb Espanya.
Sr.Foix: Para cruzar un rio la mayoría de las veces no hacen falta puentes…es suficiente con tener ganas de cruzarlo…
I saber nadar i guardar la roba. Es parla masa comparat amb que es fà.
Està bastant clar que ERC, un dia o altre, es menjarà a CIU.
Catalunya es va definir molt clarament a favor de la independencia en les últimes eleccions, votant al partit que des de sempre, ha estat clarament independentista,(ERC) en les últimes elecccions, i rebutjant als nous vinguts ( CIU-PSC). Catalunya va dir, si hem d’anar cap a la independencia, que sigui liderats pel partit que sempre l’ha defensat.
Carme Chacón va fer la frase massa llarga, per contestar Pere Navarro. Només dient: «Nunca me presentaré » hagués estat suficient.
Pel que fa a la monarquia, ningú mai l’ha votada. És una rèmora més que ens hem de treure de sobre. No és un instrument útil, és una càrrega innecessaria.
Està clar que els ponts, entre Catalunya i España,estàn trencats El diàleg hauria de ser la sol.lució, però parlem llengües diferents, i no ens entenem.
Per bé o per mal,no hi ha marxa enrera.
Rosamaria, em sembla mala política enfrontar votants independentistes amb sensibilitats diferents. Penso que hi caben tots: ERC i CIU, i ningú s’ha de menjar ningú. Junts vencerem! No vulguis separar.
No era pas la meva intenció, Jordi P. Potser m’he expresat malament.Només volia fer una fotografia dels resultats de les últimes eleccions, on ERC, va creixer molt per sobre de CIU i PSC, això no vol dir pas que els vulgui excloure. Com més serem, més força tindrem, ara bé, aquesta força a de ser necessariament en la mateixa direcció.