El Barça y el factor humano

Gerardo Tata Martino, nuevo entrenador del Barça

La apuesta para designar nuevo entrenador del Barça es siempre arriesgada, compleja y difícil. Los tres últimos fueron una sorpresa para el barcelonismo.

Los formidables éxitos de Rijkaard, Guardiola y Tito no los habrían ni siquiera vaticinado los más entusiastas. Si la memoria no me falla los tres fueron fichados con carácter de urgencia, una apuesta de emergencia, que dio muy buenos resultados. Estos años dorados del mejor equipo del siglo XXI son también una incuestionable aportación de los jugadores que han transitado por el club.

Por los que vinieron y marcharon y por los que han formado el núcleo duro de lo que se puede llamar la escuela del Barcelona. Alves, Xavi, Iniesta y Puyol los han conocido a todos. Messi llegó a conseguir cuatro Balones de oro en los tiempos de Pep. Neymar viene para continuar la tradición. Pero lo que ha hecho posible este ciclo de victorias que se ha prolongado varios años es la formación en la Masia que fue inventada por Núñez y cultivada por sus sucesores.

La proyección internacional del Barça son los títulos y sus estrellas que han prodigado excelente fútbol por todo el mundo. El talento exportado a las ligas más prestigiosas del mundo es un activo invisible pero real. Carles Puyol, el mítico capitán, habló ayer del golpe duro que ha supuesto la recaída de Tito Vilanova obligándole a renunciar a ser entrenador. Puyol decía que «hemos recibido unos cuantos golpes duros, pero éste, si cabe, fue más fuerte y el equipo quedó tocado». El humanismo que ha aflorado en el dramatismo de los últimos días, dice mucho a favor de todos. La visita de Éric Abidal al vestuario en el día de ayer hay que enmarcarlo en este estilo en el que la persona, según afirmó Puyol, es lo más importante.

‘Tata’ Martino se encontrará con un conjunto de hombres forjados en la adversidad que con su profesionalidad y talento han sublimado la historia del Barça. El factor humano es determinante en la vida y también en el fútbol que ha exhibido el Barça desdeque se fichó a Ronaldinho. El partido de mañana contra el Bayern estaba destinado a ser algo más que un encuentro de pretemporada. Por desgracia, lo que pase en el Allianz Arena de Múnich no borrará lo que ha ocurrido estos días entre Pep Guardiola y el que ha sido entrenador del Barça hace tres días.

El factor humano será tan o más importante que el resultado deportivo. Pero la vida continúa y las relaciones personales tienen importancia siempre y cuando contribuyen a que el equipo recupere la normalidad y guarde sus sentimientos para la intimidad. La enfermedad de Tito puede ser un acicate. Pero lo que importa ahora es ponerse a disposición del técnico argentino y continuar prodigando el fútbol de gran nivel, de gama alta, con títulos de las principales categorías.

Martino ha de saber que todo está inventado, que el sistema funciona, que hay que preservar el estilo de una escuela que tiene vida y carácter propios. Organizar un grupo que acaba de pasar por un disgusto colectivo requerirá también mucho talento. Martino no llegará a tiempo para acudir a Múnich. Da lo mismo. Lo que importa es que conozca bien la dimensión humana, futbolística y social del equipo que entrenará a partir del jueves.

Publicado en Mundo Deportivo el 23 de julio de 2013

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