El fútbol no es el cricket ni mucho menos el golf. Es un deporte de resistencia, duro, que exige talento y preparación física. Pero en ningún caso debe parecerse al rugby en el que los choques del cuerpo a cuerpo o los amontonamientos de jugadores en busca del balón ovoidal perdido entre piernas, cabezas, brazos y cuerpos magullados. Neymar tuvo que ser sustituido en la selección brasileña para evitar ser lesionado por los bravos jugadores hondureños que iban a por él y no a por el balón.
El astro del Barça resumió el encuentro que Brasil ganó por 0-5 con una frase que lo explica todo: «Conseguí salir vivo». Como si acabara de salir de un campo de batalla. Algo parecido le ocurrió a la selección española en Malabo el sábado. ¿Alguien, ahora que ya se ha jugado, podría decir por qué se jugó en un país dictatorial que tiene precisamente en Madrid algo así como un gobierno en el exilio? La explicación de que Guinea Ecuatorial estaba de paso hacia Sudáfrica es muy frágil. Para hacer méritos ante una selección superior, los guineanos recurrieron al juego duro que puso en peligro la integridad física de varios jugadores de Vicente del Bosque.
Neymar ya sabe cómo le reciben en los campos españoles. Sabe también que en algunos foros madrileños se le ha colgado el sambenito de «piscinero» y que las duras faltas que recibe entran dentro de la normalidad. Messi ha recibido muchas patadas desde que se escapaba como una anguila en medio de bosques de jugadores adversarios. Hasta hace muy pocos meses parecía un juguete de ropa que no acusaba los golpes. Ahora se recupera y no volverá a jugar hasta entrado el próximo año. Repito, el fútbol no es un juego de bridge, pero habría que terminar de forma más contundente contra quienes se enfrentan a patadas de forma sistemática ante un adversario con más talento.
Publicado en Mundo Deportivo el 19 de noviembre de 2013
És l’etern enfrontament entre la força i la intel·ligència. No solament en els esports, sinó sobretot en la societat de cada dia: en les empreses, la família, els amics, els estats, les comunitats internacionals. Què són sinó les guerres?
Arribarà un dia en què s’imposi el dret i la raó sobre la força bruta?
Sr.Foix: Son los árbitros quienes han de cortar este juego duro…y de raiz…
Bartolomé, Que els àrbitres segueixen consignes superiors!!!!
Me lo temía Jordi…