El infortunio ha perseguido al Barça en una temporada que ha terminado con una resignada frustración. Caben dos actitudes. La primera es sacar el hacha y empezar a cortar ramas y troncos secos sin respetar a los que llevan sabia verde en sus fibras y que son la continuidad. La segunda es aprender de una temporada de los errores. Un gran equipo es la suma de complicidades humanas, especialmente cuando, por ejemplo, se empieza la Liga con un entrenador y se termina con una ceremonia masiva de respeto y reconocimiento a su figura en la catedral de Barcelona.
Tenía que ser la Liga de Tito y toda la estructura de comunicación y tenía que haberse volcado en esta idea. Honra mucho a Puyol que él lo hiciera en el último momento. Cuando Abidal pasó por el amargo trance de la enfermedad se supo positivar la situación y fue él quien levantó la última Champions en Wembley. Me dirán que no se podía haber positivado el inexplicable bajo rendimiento de Messi en los cinco partidos clave del final de temporada. Es cierto. Pero el club tiene que disponer de un plan B para hablar con el jugador y transmitir a la afición las causas de su tristeza futbolística que le llevaron incluso a insinuar que si el barcelonismo no le quería se iría a otra parte. El club tiene que aislar al equipo de los entornos malignos que revolotean sobre el club en busca del provecho propio.
Ahora que ya no queda nada en juego quiero decir que aquellos asados en público cuando se decidían los grandes títulos no era la imagen más combativa. El ‘flaco’ Simeone perdió en Lisboa pero sacudió dos veces al Barça en el último tramo de la temporada con entusiasmo, voluntad, esfuerzo y contacto directo con su gente. Es la tarea que le espera a Luis Enrique, con o sin psicólogo, para engrasar a un equipo con el lubricante del factor humano.
Publicado en Mundo Deportivo el 27 de mayo de 2014
Sr. Foix: Recuerdo que hace años estaba viajando en el metro y sin querer oía una conversación, en la que dos personas hablaban de futbol y una de ellas dijo : En esto del futbol da la sensación de que existe una compraventa de jugadores y un tráfico internacional de divisas…».
Viajando en el metro se aprenden muchas cosas Albert…
Y tanto que se aprende, BartoloméC. Porque a veces dicen la verdad, aunque sean suposiciones.
Sr.Foix: Una cosa es la variante deportíva del Fútbol y otra la variante colateral de todo lo que le rodea, hay cosas que deportivamente no se explican sin saber la variante de lo que rodea a todo este mundillo…algún día sabremos qué ha pasado este año y todas sus variantes…
Sr.Foix Luis Enrique parece buena opción. Falta la tilde en fútbol.