Las elecciones de 2008 las ganó Barack Obama bajo el slogan de “yes, we can”. El “sí podemos” lo utilizó el senador por Illinois para combatir las consecuencias de las dos presidencias de George W. Bush que habían abocado al país a dos guerras perdidas en Oriente y a una crisis económica que todavía perdura en buena parte de Occidente.
En el fondo del discurso de Obama se encontraba la vieja pugna entre los liberales que se envalentonaron con la revolución conservadora de Reagan y Thatcher y los que no renunciaron a una cierta presencia del Estado como órgano regulador para garantizar una cierta equidad en la distribución de la riqueza. Los teóricos de las escuelas liberales norteamericanas y los viejos socialdemócratas europeos que tenían como referente al economista Keynes.
La ausencia de Estado es peor aún que la presencia de un Estado injusto, puesto que deja campo libre a la pura confrontación de fuerzas brutas, que se preocupan más de lo individual que de lo que pueda interesar más a la colectividad. La ausencia del Estado fomenta el enriquecimiento sin escrúpulos y la disminución de garantías para la seguridad y libertad de todos.
El sí podemos fue trasladado a una Europa azotada con más virulencia por la crisis económica. Nacieron en España los movimientos del 15-M que se tradujeron en una formación política como la de Podemos que ha hecho acto de presencia en las instituciones democráticas españolas.
En las últimas elecciones consiguió 79 diputados y se convirtió en la tercera fuerza política en el Congreso. Habrá que ver cómo queda la nueva formación después de haber construido una alianza con Izquierda Unida y los restos del naufragio comunista a partir de los años noventa. Quedan 40 días para comprobar si este movimiento tiene un largo recorrido político o bien habrá sido una flor efímera y sin raíces.
En una de sus obras Zygmunt Bauman dice que la modernidad nació bajo el signo de una confianza inédita: podemos conseguir y, por lo tanto, lo conseguiremos, es decir, podemos refundar la condición humana y convertirla en algo mejor de lo que ha sido hasta ahora.
Movimientos como Podemos, ahora rebautizado por Unidos Podemos tras la coalición electoral con IU, llenan el vacío creado por la inoperancia de los partidos clásicos que no han sabido responder a los retos de la nueva situación derivada de las crisis social, económica, política y de valores que se han sobrepuesto en los últimos diez años.
Sí, se puede cambiar una situación concreta en unas elecciones. Pero es improbable que se cambie precipitadamente el estado de las cosas. Sobran palabras, hay un exceso de retórica, y falta más comprensión de los problemas para poderlos resolver.
La solució per a Catalunya és la independència, que podrem aconseguir-la si estem units. certament UNITS PODREM.
«La estupidez es el condimento secreto que los historiadores tienen problemas para identificar en esta sopa que seguimos sorbiendo.”
» tenía una certeza que solo se alcanza cuando la historia te da una patada en el culo: que en cualquier esquema ambicioso los individuos son superfluos e insignificantes. Que las personas que no son conscientes de que les puede suceder lo mismo que a nosotros en cualquier momento pueden llegar a ser despiadadas. »
“Soy miembro de esa minoría que se rehúsa a ser parte de una minoría oficialmente reconocida.”
«Nota a los historiadores del futuro. No lean el New York Times. Lean a los poetas.”
Charles Simic
«el sentido último de la poesía es enamorarse del mundo a pesar de la Historia»
Derek Walcott
Tres mensajes en un día, Cartola :
https://www.youtube.com/watch?v=6eYqMR7E_P0
https://www.youtube.com/watch?v=-47Q8OK43Gk
Entre las multinacionales y la banca o los estados corruptos financiados por esas multinacionales y esa banca el ciudadano medio mete papelitos en cajas hasta contentarnlos, no vaya a venir algo peor, como lo que lee en diarios ve en televisión y comenta en Internet . Siempre el miedo como motor de la civilización.
Las multinacionales y demás poderes fácticos siempre tienen un plan B y van por delante de nosotros…
Sr.Foix: mi natural escepticismo me lleva a pensar que lo que no podemos es seguir tal y cómo estamos…no sé si Unidos Podemos acabará siendo Unidos Pudimos…pero lo que para mi es evidente, es que todavía no he visto que se pongan soluciones factibles a problemas reales, veo más bien mucha teoría, mucha palabrería barata para captar el voto descontento, mucho eslogan twittero y mucha promesa de reparto de cargos…volvemos a vivir la primera etapa de la Transición Bis y vuelve a estar dirigida por un profesorado universitario, deseoso de instalarse en las administraciones del sistema del Estado, pero con mejor sueldo y futuro…utilizando, como entonces, a una juventud universitaria que con su ilusión, juventud, bajo coste y empuje, amplifica todo el movimiento…más de lo mismo que ya vemos cómo acabó…
Sr. Foix: Me quedo con todo el último parrafo, porque expresa la realidad del presente, del futuro y de siempre.
El libro de mi amigo es un best seller, pero su autor aspira a que sea un long seller, un libro de referencia, de consulta, de estudio. Lo sera.
Lo de Podemos e Izquierda Unida es un exito, pero aspira la coalicion a que sea una conjuncion de largo recorrido.
Yo tambien lo deseo y mi amigo el escritor tambien, coincidimos, tambien coincidimos en que no seria bueno que arrasaran, pero si que se conviertan en una colalicion estable para control del sistema y de los partidos que se releven en una mejor gobernanza desconocida en los ultimos años por la falta del otro plato de la balanza.
La escritura y el oficio siempre te salvan. Los guisantes riquisimos.
Unidos es posible que puedan. Y si se puede, se puede. Hubiese estado más contundente: Unidos Podremos…
Creo Desiderio, que siguiendo la línea de estos dos partidos y si querían ser coherentes, el nombre tendría que haber sido «Unidos y Unidas Podemos»…
Correcto Lluís. «Podemos» y ahora «Unidos Podemos». La suerte está echada, Solución el 26 J.