Las sonrisas y el buen rollo entre Leo Messi y Luis Suárez en el banquillo eran la metáfora de un partido que se ganaba en plena rotación masiva. El uruguayo no jugó y el genio argentino abandonó el campo a mitad de la segunda parte con cara festiva. Un hecho infrecuente en el historial de Messi en el Barça. Aleix Vidal acababa de meter un gol y dejaba de ser un despechado de Luis Enrique. Incluso Alcácer marcaba por segunda vez desde que llegó del Valencia. Piqué abandonó en el minuto 46 y Rafinha sufrió una ruptura nasal tras un encontronazo fortuito con Ter Stegen. Iniesta y Busquets estaban de baja. A pesar de estas incidencias el Barça de Luis Enrique resolvía un encuentro con el siempre complicado y bronco Athletic bilbaíno. Mientras todo esto ocurría los relatos en directo de las radios catalanas no mostraban gran entusiasmo. Más o menos como las madrileñas que con cierto griterío y desconfianza iban describiendo los goles que sentenciaban el encuentro. Todos coincidían en que Neymar estaba haciendo un gran partido. Pero este equipo, venían a decir, no es lo que era. Por supuesto que no es el mismo que desde que lo empezó a entrenar Rijkaard ha conseguido la cosecha más grande de títulos de su historia. Pep Guardiola subió al Barça a lo más alto del Olimpo. Pero Tito Vilanova marcó récords en su breve paso como entrenador y no sabemos dónde habría llevado el club si la enfermedad no le hubiera segado prematuramente la vida. El paso de Tata Martino fue un accidente imprevisto. El hecho es que Luis Enrique sigue el mismo ritmo de victorias de sus cuatro antecesores. Los clubs no tienen fotos fijas. Evolucionan y cambian. Pero el espíritu es el que perdura. Los entrenadores son piezas clave aunque los éxitos de estos años hay que atribuírselos de forma principal a Messi, al embajador sonriente Ronaldinho, a Valdés, Iniesta, Busquets, Xavi, Piqué, Neymar y todos los que han participado en la larga rotación que ahora Luis Enrique va practicando con el criterio de no llegar a final de temporada con una plantilla exhausta. Hoy está en juego la final de la Copa contra el Atlético.
Publicado en Mundo Deportivo el 7 de febrero de 2017
Sr.Foix: la final ya está en el bote…