Vi la alegría de Pep Guardiola y el entusiasmo de los jugadores y público del Manchester City celebrando la segunda Liga consecutiva, un hecho que no se había producido desde hacía diez años. La rivalidad con Jürgen Klopp duró hasta el último partido. De hecho, durante once minutos el Liverpool estaba por delante hasta que, al final, el City hizo una exhibición con goleada. Un final de la Premier tan intenso que no se tenía recuerdo. A continuación el Barça de Valverde disputaba el penúltimo partido con horario unificado. Ganaba también la segunda Liga consecutiva, resuelta cuando todavía faltaban cuatro jornadas y con el Madrid a 18 puntos. La traumática derrota de Anfield, un 4-0, pesaba sobre el Camp Nou que en vez de celebrar una nueva Liga, la número 26, parecía que asistía al fin agónico de una temporada desastrosa. Hay quien piensa ilusamente un fracaso si no se consigue el triplete.
La grandeza del deporte comporta a veces la experiencia y la humillación de las derrotas. También el Manchester City fue eliminado de la Champions ante el Tottenham. Pep Guardiola ha conseguido tres Bundesligas con el Bayern y dos Premiers con el City. Un entrenador de elite. Pero la última Champions la ganó con el Barça. Valverde, Messi y el resto del equipo salieron tocados pero no hundidos de Anfield. El tonto cuarto gol nos dejó descompuestos. Pero el ambiente mayoritario en el Camp Nou no fue el de un funeral de tercera. El barcelonismo no se deja arrastrar por los profetas apocalípticos y sabe leer la realidad en su medida justa.
Publicado en Mundo Deportivo el 14 de mayo de 2019
Es que los culés somos tan divinos y sobrenaturales que vivimos una especie de sueño que nos hace estar por encima de los mortales, pero no, somos iguales a todos.
Millonarios que cuando ganan son como dioses y cuando sufren la derrota siempre és por causas ajenas.
Bienvenidos sean a la tierra, de todos.
La filosofa Marina Garces ha testificado hoy en el judici del proces.
Tiene pendiente un cafe con el Sr. Cuixart. Alucina. La noche anterior al 1O tenia decimas….
Total que al juez Marchena le ha dado un hartazgo de tanto guayismo y la ha reconducido como ha podido.
Tots plegats van mas que sobreactuados y esto ya da un cante importante.
Si no fuera por la gravedad del hecho de que hay injustamente politicos en prision por este tema, el asunto tendria que pasar directamente a la seccion de espectaculos.
Y lo que te rondare…
Una buena pitada no hubiera estado mal para estos profesionales que no remataron bien su trabajo en la Champions y que incluso van fotre el pena en el cuarto gol que es de patio de colegio. Se puede perder, pero no asi.
Dicho lo cual, la Liga es la Liga i es que mai estem contents. Es verdad.
Visca el Barça!
«que es de patio de colegio»
Eh oui, un but de «cour d’école» 🙂 🙂