Contaba Jaime Arias que Salvador Dalí le preguntó cómo tenía que recibir una visita en su residencia de Portlligat. ¿Hago de Dalí o voy de normal? Haga de Dalí, le sugirió Arias. Y el genio de Figueres se disfrazó de surrealista y atendió al forastero simulando un entusiasmo que no era tal. La normalidad en los artistas no pasa a la historia.
Me apetece simular que el Barça ganará esta Liga a seis jornadas de terminarse. Todo es posible y los que hemos celebrado dos Ligas con el Madrid perdiendo en Tenerife en el último suspiro no hace falta que nos disfracemos de Dalí. No es bueno dejarse impresionar por un gran taconazo de carambola de Benzema ante un agónico Espanyol que siento de veras que no pueda salvarse. Esta noche puede ser el punto de inflexión para decantarse por la esperanza o por pasar página de esta Liga y abandonar la idea de la novena en doce años. Piqué no es un oráculo fiable. Al empatar en Sevilla advirtió que “será difícil ganar esta Liga” y antes de pinchar con el Celta vaticinó que “esto todavía no se ha acabado”.
Si se gana hoy al Atlético de Simeone, no se habrá dicho ciertamente la última palabra. El problema no es Quique Setién como no lo fue Ernesto Valverde. Si me apuran tampoco la edad de Messi, Suárez o el propio Piqué. Es el ánimo el que está envejecido, es el aburguesamiento ambiental de una de las mejores plantillas del mundo que ha olvidado que para triunfar hay que estar en total forma física y jugar cada partido como una final.
Publicado en Mundo Deportivo el 30 de junio de 2020
Recordar que el año pasado de ganó la Liga con gran diferencia de puntos con el Real Madrid y NO SE CELEBRO, parecía que era poco importante. ¿Cuando celebraremos otra?.
Sr.Foix: Forma física…ha tocado Vd dónde más duele…
Despues del mayestatico articulo de su terra ferma de ayer, lo del Barça de hoy queda como menor.
Partido a partido, Articulo a articulo.