Menos retórica y más gestión

El gobierno de Catalunya depende de que Puigdemont se ponga de acuerdo con Pere Aragonès y ERC.

La política se basa en el hecho de la pluralidad de los hombres. Es una frase de Hannah Arendt que no pretende ser definitiva pero sí que responde a la realidad más aproximada. Y es malo para un país si no se tiene en cuenta que una de las grandes virtudes de la democracia es su imperfección que se demuestra a diario en el enfoque contrapuesto sobre los intereses de todos.

Un sistema que desprecie al distinto, al que piensa diferente, al que critica, no puede prosperar. Hubo quien pensó en 1974 que tras la dimisión forzada de Nixon por el escándalo Watergate, Estados Unidos entraría en un periodo de declive. Y no fue así. Hablando del origen de la democracia ateniense, el filosofo Karl Popper decía que “en una democracia nadie es insustituible y por mucho que admiremos el liderazgo hemos de ser capaces de hacerlo sin ningún líder particular, de lo contrario puede convertirse en nuestro amo y la principal tarea de la democracia consiste en evitarlo”.

Que las campañas electorales se conviertan en campos de batalla dialécticos no puede extrañarnos. Un político en campaña va desnudo o lo desnudan. Es el precio que hay que pagar. Lo más relevante no es lo que se dice en las campañas sino qué se hace cuando ha terminado el escrutinio y hay que empezar a gobernar.

En las elecciones a la comunidad de Madrid saldrá un gobierno que en poco tiempo se supone que se pondrá a trabajar. Es interesante el duelo Sánchez-Ayuso y serán jugosas las diatribas de los próximos días hasta el 4 de mayo. Luego intentarán llegar a pactos y el que obtenga mayor apoyo en la cámara madrileña formará gobierno.

Las cosas no son tan fáciles en Catalunya donde hemos entrado en el tiempo añadido para formar gobierno. Un gobierno independentista que tiene la mayoría en el parlamento. Pero no hay manera. No se trata de gobernar sino de establecer primero quién manda. Montesquieu decía que “cuando en un reino, es más ventajoso cortejar a los que mandan en vez de que cada uno cumpla con su deber, todo está perdido”.

El defecto principal del político de hoy es que habla más que trabaja. Al menos, eso parece. La retórica es más importante que la gestión. No habrá gobierno en Catalunya hasta que Puigdemont de el placet a Pere Aragonès. El mando a distancia es lo más alejado de las prácticas democráticas porque impide que haya debate y se expongan los intereses contrapuestos de toda sociedad plural. Cada día que pasa pienso que tenemos un serio problema con el funcionamiento de las instituciones democráticas.

  7 comentarios por “Menos retórica y más gestión

  1. Sr. Lluis recojo dos palabras que me gustan de su articulo…Gestión y Cortejar.
    La gestión va ha llegar aunque en el camino haya accidentes, pero clave.
    El Cortejo, se siente y genera una pasividad y esto va a ser grave.
    Un lider con un equipo gestor, que nos una, va a ser la fuerza para poner a este pais en cabeza de España y lo hemos sabido hacer.
    Hay potencial para sumar con empresas y ejecutivos, solo falta la chispa.
    Saludos.

  2. COMANDAMENT A DISTÀNCIA DES DE SAINT-MARTIN-LE-BEAU I WATERLOO

    1. ”Un sistema que menysprea al diferent, al que pensa diferent, al que critica, no pot prosperar”. D’acord. Un sistema institucional / polític / judicial / policial / mediàtic que assetja al diferent (el sobiranisme català, per exemple) per mitjà de la desqualificació, la mentida, la presó, l’exili, la inhabilitació dels seus dirigents, càrrecs executius i parlamentaris no prospera. Es mes, atempta contra la Declaració Universal dels Drets Humans que ha de ser respectada per les Constitucions, inclosa l’espanyola.

    2. Els espanyolistes annexionistes desacrediten al pres Oriol Junqueras i, sobretot, a l’exiliat Carles Puigdemont. Els donaven per políticament liquidats. S’han equivocat. ER té 33 escons i Junts te 32 escons. Total 65 escons. Als que s’han d’afegir, els 9 de la CUP. Total, 74 escons independentistes al Parlament de Catalunya.

    3. Llavors comença l’operació annexionista de desqualificar a Junqueras i Puigdemont acusats de manar des de la distància. Diuen: “El comandament a distància és el que està més allunyat de les pràctiques democràtiques”. No. L’autoritat ètica i política dels presos i exiliats és una victòria ètica i política sobre els que els han forçat a anar a la presó i a l’exili. El comandament a distància realitzat des de la Zarzuela, des de la Moncloa, des de l’aparell judicial, des de les clavegueres de l’estat, des de caverna mediàtica es el que está mès allunyat de les pràctiques democràtiques.

    4. En tot cas, el comandament a distància del president Carles Puigdemont des de Waterloo i, en el seu dia, el comandament a distància del president Josep Tarradellas des de Saint-Martin-Le-Beau no persegueixen als que pensen i voten diferent ni envien gent a la presó o a l’exili.

  3. El declive es mas que evidente y en manos de unos insensatos.
    Sr. Foix, esto ya no es democracia y a partir de ahi puede pasar cualquier cosa.
    No anem be. Y esta semana martes y 13.

  4. No hay gestión y esto hace tiempo que pasa factura y tenemos suerte que los empresarios, autónomos e industriales q no dependen de suplicar una subvención, se apañan y siguen adelante a pesar de las barreras de los politicos, que claro dirán que la culpa de lo que pasa es de fuera. Como dicen los economistas los politicos deben incentivar la económia no poner dificultades. Seguimos estando muy lejos de Dinamarca y mucho mas de Singapur.

    • Por Màrius Carol: «En medio de una descomunal crisis sanitaria, económica y social, tras medio año con un gobierno en funciones y con una urgente necesidad de negociar las ayudas europeas, no se entiende este festival del tacticismo. Presumen de querer mucho al país, pero lo cierto es que lo maltratan.»

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