Había motivos para pensar que volverían a dispararse los cañones de agosto como los que describió Barbara Tuchman al historiar la Gran Guerra de hace poco más de un siglo. Una chispa en un rincón de los cuatro imperios que desaparecerían al cabo de cinco años iba a prender el fuego de la guerra por toda Europa. El asesinato de Sarajevo en junio de 1914 fue el pretexto para que Alemania ejecutara los planes de su Estado Mayor, que preveían tomar París en tres semanas y adueñarse de todo el continente.
La experiencia de más de un siglo ha demostrado que en esta incubadora de conflictos que ha sido Europa históricamente, no siempre los que abren las hostilidades son los que acaban venciendo. Más bien al revés.
Es inútil predecir qué va a ocurrir en Ucrania después de que Putin decidiera unilateralmente y sin motivo invadir un país soberano. Seis meses de conflicto abierto no han resultado en una victoria decisiva por ninguna de las dos partes.
La guerra continúa, y las negociaciones secretas para detener las hostilidades y dar tiempo a dar sepultura a las decenas de miles de soldados de ambos bandos caídos en combates que han destruido barrios residenciales de ciudades ucranianas no han dado todavía resultados que conduzcan a un armisticio inmediato.
La mediación del presidente Erdogan ha conseguido que decenas de miles de toneladas de cereales ucranianos hayan llegado a sus destinos habituales.
Hay varias cuestiones que determinarán el curso de una guerra que libran dos países, pero que tiene resonancias en todo el mundo, afectando al coste de la vida, la seguridad nacional, la inviolabilidad de las fronteras y una nueva geoestrategia que está fuera de control en estos momentos.
Lo más lógico es que la fuerza de Rusia acabe imponiéndose sobre una resistencia ucraniana que ha frenado al poderoso ejército de Putin, que ha mostrado su vulnerabilidad y su falta de preparación para una conquista de estas dimensiones.
La clave de la resistencia de Zelenski está en la ayuda occidental y, principalmente, en la determinación de la Administración Biden de suministrar armas y ayuda económica para que Putin no anexione un país grande. Los ataques con drones a instalaciones militares rusas en Crimea inquietan al Kremlin, que no calculaba la capacidad de los ucranianos de defender su territorio y mucho menos penetrar militarmente en territorio ruso atacando objetivos militares estratégicos.
Como todas las guerras, se sabe cuándo empiezan, pero se desconoce cómo, cuándo y dónde acaban. Y, sobre todo, no se tiene en cuenta cuántas vidas se sacrificarán en el altar de la patria, de la ideología, de la conquista o de los errores de quienes no han tenido el valor de detenerla a tiempo. Es la primera guerra en Europa donde los ciberataques y las nuevas tecnologías se complementan con las batallas de atrición destructivas de personas y bienes de todo tipo. Es una barbarie que ni rusos ni ucranianos quieren o pueden detener.
Europa se ha mantenido unida en la condena a Putin y en la ayuda a los ucranianos. Gran Bretaña, con un primer ministro fuera de servicio, está alineada con Washington con la nostalgia de las dos guerras últimas siempre presente.
Pero dentro de un mes hay elecciones en Italia y los sondeos indican que podría salir un gobierno de extrema derecha con partidos y líderes que han mantenido buenas relaciones con Putin. Salvini es uno de ellos, y con una probable alianza con el Gobierno de Orbán en Hungría y los partidos de extrema derecha en todo el continente que no quieren enemistarse con Putin ni tampoco aliarse con los gobiernos que claramente han apostado por la defensa de Ucrania. El peligro de Europa está dentro de ella misma.
La paradoja es que mientras Rusia tenga la llave de paso del gas para calentar a los europeos en cuanto lleguen los primeros fríos, Alemania y otros países, también España, seguirán pagando las facturas de gas que todavía llega de Rusia y que sirve a Putin para financiar la guerra. Es una situación que no tiene sentido y que pone sobre el tablero geopolítico los grandes errores cometidos por la poderosa Alemania por fiarse de Rusia en algo tan elemental como el suministro de la energía. Putin espera el invierno. Pero la partida no ha hecho sino empezar, y el mundo que nos espera será distinto, doloroso, para, finalmente, construir una nueva realidad geoestratégica global.
Publicado en La Vanguardia el 24 de agosto de 2022
DATOS REALES.
-La dimensión económica de Rusia es semejante a la española.
-Presupuesto Militar de Rusia 65.900 millones de Dólares.
-Presupuesto de la OTAN mas de 1 Billón de Dólares.
-Presupuesto de la Alianza Europea sin Suecia ni Finlandia 328.000 millones de Dólares, 5 veces mas que el de Rusia.
No es por incordiar.
Datos reales.
Rusia tiene los mayores yacimientos de petróleo y gas del mundo.
Rusia tiene los mayores recursos minerales del mundo.
Rusia es el país con más territorio del mundo.
Rusia tiene el mayor arsenal nuclear del mundo.
Rusia sabe lo que es pasar por una Segunda Guerra Mundial, Stalin, y la caída en los infiernos cuando se disolvió la URRS.
Saludos!
URSS, perdón!
Y con toda esta riqueza genera una calidad de vida, educación, sanidad……
Fransesc yo tampoco quiero incordiar, pero le daré mas datos en plan preguntas.
-Ha comprado alguna vez o asiduamente productos rusos?
-Conoce algún Laboratorio Farmacéutico Ruso?
-Ha viajado alguna vez en aviones rusos Antonov o Iliushin?. Unos militares españoles si. Desgraciadamente una sola vez.
-Ha comprado electrodomésticos o sanitarios Rusos?
-Algún producto industrial Mecánico o Eléctrico?
-Ha visionado alguna película rusa?
-Conoce la Arquitectura de la construcción de viviendas rusa?
-Por último la gastronomía. Hoy comeremos pollo que a los españoles les encanta. Ponen una olla en el centro de la mesa y con un cucharon sirven caldo a los comensales. A continuación sacan un pollo entero hervido, eso si desplumado y con unas tijeras te preguntan si prefieres aleta, muslo o pechuga.
Si viaja Vd. a Rusia, por Dios no se ponga enfermo. haga como Yeltsin, a Barcelona rapidaménte.
Real como la vida misma.
Pensaba que hablabamos de fuerzas militares, recursos, y capacidad de resistencia y no de «nuestro sistema de vida».
Saludos,
Cordialment, Fransesc.
Por cierto mi nombre es Francesc no Fransesc.
La UE ha tomado parte en el tema en vez de ser plataforma de dialogo. Y aqui la movida es siempre lo mismo y para los mismos.
El coktail que se fragua es tremendo, invierno, guerra, inflacion, escasez de agua y alimentos…
I aqui la consellera recomanan top less a gogo. Y el guaperas total dandose un baño por las americas.
La tonteria y la decadencia es apabullante,
LES DEMOCRÀCIES AMB L’UCRAÏNA SOBIRANA I INDEPENDENT
1.- A “L’hivern entra en batalla”, l’autor afirma que Vladimir Putin “ha decidit unilateralment i sense motiu envair un PAIS SOBIRÀ”. Aquest país sobirà és, des del 1991, Ucraïna. Les democràcies estan a favor de la Ucraïna sobirana i independent.
2.-. Val la pena que els hipotètics lectors espanyols i catalans, constitucionalistes i independentistes, coneguin l’Acte d’independència d’Ucraïna amb les seves clares referències a l’autodeterminació, la sobirania, la independència.
3.- Aquesta és l’Acta de Declaració d’Independència d’Ucraïna:
“En vista del perill mortal que envolta Ucraïna en relació amb el cop d’estat a l’URSS el 19 d’agost de 1991,
Continuant la tradició mil·lenària de desenvolupament estatal a Ucraïna,
Partint del dret d’una nació a l’autodeterminació d’acord amb la Carta de les Nacions Unides i altres documents jurídics internacionals, i
Aplicació de la Declaració de Sobirania de l’Estat d’Ucraïna,
la Rada Suprema de la República Socialista Soviètica d’Ucraïna declara solemnement la creació d’Ucraïna i la creació de l’estat ucraïnès independent, UCRAÏNA.
El territori d’Ucraïna és indivisible i inviolable.
A partir d’avui, només la Constitució i les lleis d’Ucraïna són vàlides al territori d’Ucraïna..
Aquesta llei entrarà en vigor en el moment de la seva aprovació”.
Molt bona reflexió. De totes maneres, també cal recordar que fins i tot quan formava part de la URSS, Ucraïna no només va ser membre de la ONU, sino que fins i tot va ser dues vegades membre del Consell de Seguretat. Vull dir amb això que sempre va tenir un «status» de nació. Com també és cert que Crimea era rusa, fins que Nikita Khruschov literalment la va «regalar» a Ucraïna.
Ya tenemos aqui, al general invierno, procefente de la Siberia Rusa y los europeos presentimos que nos traerá la muerte.
Pero como somos inverosimiles aguantaremos.
Sangre, Sudor y lágrimas. Tontos y muertos,
Abel el tolerante, permisivo, esclavista practicante, ect.
Mucho bla, bla. bla, pero todo sigue igual in secula seculorum amen, Urbi et Orbi