Es posible y es probable. El Barça de Xavi Hernández pasó el muro de Diego Simeone y consiguió los tres puntos más complicados de lo que quedaba de temporada. Quedan ocho jornadas y ha empezado el modo sprint final para cosechar otra Liga. Mañana por la noche se puede dar otro paso en el campo del Rayo Vallecano. Algún mérito hay que atribuir a Xavi si a estas alturas le distancian once puntos del segundo, el Real Madrid de Carlo Ancelotti que se medirá con el Manchester City de Pep Guardiola en Champions y tiene una final de Copa pendiente contra Osasuna en Sevilla.
Si de algo puede presumir el Barça es la extraordinaria profesionalidad de Ter Stegen, que ha encajado solo nueve goles en la competición, un récord en la historia de la Liga. No hay un registro en Europa de 23 partidos con la portería a cero.
Pero delante del portero alemán está Araujo, el uruguayo que puede considerarse como el mejor central en el mercado. Y Koundé, Marcos Alonso y Balde. Jordi Alba ha jugado partidos decisivos. A partir de ahí, el cuadro central y atacante presentan un diagnóstico más incierto.
Las lesiones de Pedri, De Jong y Dembélé han influido y la sanción de tres partidos a Lewandowski, también. El delantero polaco tiene tanta hambre de gol que se olvidó de pasar un balón a Raphinha, que habría burlado a Oblak sin problemas. Debe pensar más en el equipo que en mantenerse como máximo goleador.
La marca Barça es institucional que no patrimonial. Los genios y los estilos pasan adaptándose a los cambios de los tiempos. Xavi Hernández viene de una era de excelencia como jugador y ahora, como entrenador, cambia el método que no está esculpido sobre mármol. Puede ganar la Liga. Su reto será competir en Europa.
Publicado en Mundo Deportivo el 25 de abril de 2023
Ganar una liga mas y despues ser descendido a segunda (como minimo) por corrupcion encadenada y por borregez manifiesta. Un caso inedito que este si que podra escu(l)pirse en marmol (blanco!)
El banco lo resiste todo, Ayuso, Franco o LO QUE VENGA