La cumbre de Granada es la última reflexión conjunta europea antes de que la guerra de Putin contra Ucrania se convierta en un conflicto que se extienda territorialmente a otras partes del continente.
Pedro Sánchez es el anfitrión de la presidencia rotatoria de la UE, pero también el que acogió a los líderes de los países que están llamando a la puerta de la Unión, de los que salieron como el Reino Unido, incluso de Kosovo, que no está reconocido oficialmente por España. Apareció sin ser anunciado el presidente Zelenski pidiendo más armas ante la llegada del invierno y suplicando que se mantenga la unidad occidental en la ayuda económica y militar que Ucrania necesita frente a Rusia.
La Comunidad Política Europea se reunía por tercera vez, solapándose con el Consejo Europeo que se celebrará hoy. La agenda va desde la inmigración hasta la Inteligencia Artificial, pasando por la ampliación de la UE. Muchos desafíos concentrados.
Pero el tema central, la gran preocupación y angustia latente de todos, es la guerra en Ucrania, que el propio Sánchez atribuyó al “imperialismo de Putin” y al “uso injustificado de la fuerza” para resolver un conflicto con un país vecino.
Diría que la crisis política española y el precio que se pueda pagar para la investidura de Sánchez son una nota a pie de página de este momento en el que están en juego la seguridad, la estabilidad, la prosperidad y la libertad de los europeos. Putin lleva 588 días atacando a Ucrania y arrasando ciudades enteras. Los daños materiales de esta guerra son incalculables, pero los miles de muertos en acciones de guerra son irreparables. El dolor de los vivos y los millones de emigrados o desplazados son una muestra del mal causado por una guerra innecesaria y unilateral.
Europa solo superará la amenaza de Putin si está unida y si actúa con firmeza para desactivar la ofensiva militar de un líder autoritario que no tolera sociedades libres a su alrededor. Sus terminales de propaganda han penetrado en todos los países occidentales. El factor tiempo juega a favor de Putin y las muestras de cansancio en Estados Unidos y en Europa empiezan a aflorar política, social y económicamente. La cumbre de Granada puede ser un punto de inflexión para darse cuenta de lo que está en juego en estos momentos.
Publicado en La Vanguardia el 6 de octubre de 2023
El episodio transhumante en el passeig de Gracia ha sucedido.
Ahora toca tema Israel. El Sr. Foix estuvo por alli hace poquito y nos sabra ilustrar.
Tot plegat es molt trist.
Pronto a nivel 5
Mañana ni manifestaciones ni res de res.
Si fueramos un pais serio claro.
Inglaterra es ella, recorde, que cuan Hitler, al principi anaba a favor i despres li va convenir anar en contra. Ara es idem de idem. El negoci es el negoci i tots contens.
Los ingleses, querido don Lluis, son leche de cabra, les conozco, bien por lo demás buen articulo, poderado, nafa vociferante. salutem plurimam