La inédita carta del presidente Sánchez a los ciudadanos españoles evidencia una seria crisis institucional. No recuerdo un caso en las democracias liberales en el que un presidente de gobierno suspenda cuatro días su agenda para reflexionar sobre si merece la pena seguir en el poder. Al cuarto día comunicará si sigue en el cargo, si propone una moción de confianza, si dimite, o nos anuncia alguna jugada táctica al límite de la resistencia. Sánchez nos ha sorprendido con decisiones inesperadas que hasta ahora le han salido bien.
Quien no lo sabe todo puede no saber nada. La carta de Sánchez ha encendido la imaginación, las fábulas, las conspiraciones en millones de españoles que, a falta de una explicación convincente, elaboran teorías sin conocer aquella causa principal que lo explica todo.
A falta de los datos que permitan hacerse una cierta idea del complejo momento que atravesamos, quiero aceptar la vertiente familiar que evoca el presidente al suspender de hecho sus funciones al frente del Gobierno. Cada uno es dueño de sus sentimientos y de sus intimidades.
Pero el suspense de esta larga reflexion personal sobrepasa el factor humano y tiene consecuencias políticas de primer orden. Varias veces alude a la derecha y a la extrema derecha como causantes del acoso al que dice haber sido sometido. También se refiere a los jueces y a los periodistas que se cruzan en su camino. El sistema democratico comporta una oposición constantey una opinión pública que se nutre también de medios de comunicación hostiles. El error de Sánhez al ser investido no fue por el hecho de haber conseguido un apoyo tan heterogéneo, sino por haber levantado un muro, así lo dijo, entre los españoles, la mitad aproximada de los cuales no le votaron.
Si un sindicato insignificante como Manos Limpias, de extrema derecha, admite que las noticias sobre las que ha basado su denuncia a Begoña Gómez, esposa de Pedro Sánchez, podrían ser falsas, no sé a qué viene la súbita reacción. Lo más sorprendente es cómo un juez haya admitido a trámite la denuncia.
A la espera de conocer más datos sobre esta crisis institucional, la campaña catalana se va a centrar en el rincón de pensar de la Moncloa mientras el país se entrega a la fantasía del cotilleo político. Muy poco serio.
Publicado en La Vanguardia el 26 de abril de 2024
Les recomiendo leer en «alfdurancorner.com», el articulo SALVAR AL SOLDADO SANCHEZ.
SANCHEZ NO ES FIA DEL MEDIOCRE ILLA.
1.- El show mediàtic de Pedro Sánchez pretén dos objectius. Primer, intervenir en la campanya de les eleccions catalanes per espanyolitzar Catalunya combatent contra els seus drets i les seves llibertats.
2.- Segon, intervenir també en la campanya degut al fet que no es fia de la mediocritat de Salvador Illa, mediocritat demostrada en la seva gestió com ministre de Sanitat durant la pandemia de la covid.
3.- L’espanyol Illa defensa la sobirania d’Espanya i la monarquia borbònica imposada pel dictador Francisco Franco. Però Illa està en contra de la sobirania de Catalunya i de l’autodetermnació dels pobles que és un dret democràtic i universal. Aquests plantejaments del PSOE de Sánchez i Illa coincideixen amb partits de procedència franquista com PP, VOX i Ciudadanos.
Efectivament «Lo más sorprendente es cómo un juez haya admitido a trámite la denuncia», pero no sorprende ni esto, ni la puerta de atrás de la Sala 2º del supremo, ni de las no-sentencias que han costado 2 años de cárcel a un expresidente del Barça, ni de todos los casos que tienen el mismo modus operandi, de Trias a … Estamos hartos. I que periodistas como Vd que se hagan los sorprendidos todavía más.
Aixo es lo desempre, la l’Espanya de toros i pandereta,obre la caixa dels trons per veure si consegueix torna a temps dels dictadors junt a la secta del nacional catolicisma.Quina pena dona aquesta España.
Que no se preocupe nadie por la situación del Presidente del Gobierno de España.
Está todo controlado. Atado y bien atado.
Tiempo atrás se atacó miserablemente a Marcela Topor, esposa de Carles Puigdemont, President de la Generalitat de Catalunya y no recuerdo que políticos del PSC-PSOE levantaran la voz desmintiendo los ataques.
Ya puesto les recuerdo que Pedro Sánchez firmó con convicción la aplicación del Articulo 155 contra Catalunya. Aun mas, aseguró que detendría a Carles Puigdemont, lo traería a España y lo encarcelaría. Es preciso recordar también las detenciones, encarcelamientos, exilios, facilidades a Empresas catalanas para cambiar su sede….
Creo que esta situación es una completa farsa.
Al tiempo.
Lo de Pedro Sánchez me parece una pirueta más de su manual de resistencia. Sánchez es un «killer» de la política al que todos los demás líderes de los partidos no le llegan juntos ni a la suela de los zapatos. Su indignación (impostada) no es más que una maniobra populista para generar una ola de apoyo a su favor. Otro ladrillo prefabricado en el muro contra la «fachosfera». Más trincheras. Más emoción. Más vísceras. En cuanto a lo de su mujer, lo veo como el habitual tráfico de influencias en las altas esferas. Será legal, pero dudosamente ético y estético. El nepotismo, por desgracia, es estructural en este país y cubre todo el espectro político. El mérito, el talento y la excelencia no puntúan un pimiento y el verdadero ascensor social es ser familiar, amigo o enchufado del político de turno.
Igual es un intento serio de centrar la política en el debate de las ideas, iniciativas y proyectos de los diversos programas presentados.
Dejando fuera, las batallas judiciales y mediáticas sin fundamento.
Suscribo sus palabras Alfred.