Jordi Pujol expresidente de la Generalitat de Catalunya
Siempre se ha dicho que los políticos de antes eran mejores porque supieron entender con amplitud de miras la oportunidad histórica que les tocó vivir.
No siempre es así. El tiempo, el periodismo y la academia arrojan grandes pinceladas de grises sobre las biografías de las personas con proyección pública. Alemania, por ejemplo, tiene la costumbre de arrojar pendiente abajo a muchos de sus grandes líderes. Bismarck hizo la unidad alemana tras ganar tres guerras, pero fue despedido de mala manera por un káiser celoso. Willy Brandt tuvo que dimitir por una cuestión de espionaje. Helmut Kohl no acabó bien como canciller y su sucesora, Angela Merkel, no recibió los honores que acreditaran sus dieciséis años de mandato.
Francia recuerda a De Gaulle y Mitterrand, dos presidentes del siglo pasado, pero se resiste a subir a los altares de la gloria a sus sucesores cuyas biografías son discutidas. De Italia se guarda buen recuerdo del asesinado Aldo Moro y se admira la capacidad conspirativa y a la vez pactista de Andreotti. En el Reino Unido habría que dar el salto desde Churchill hasta Thatcher pasando por Attlee, Tony Blair y poca cosa más.
Todos ellos fueron criticados e incomprendidos en sus días. A Adolfo Suárez se le llegó a negar la legitimidad y sobre Felipe González se escribió que había que echarlo por lo civil o por lo militar. Los dos fueron grandes presidentes que supieron entender la complejidad del momento. La política no es otra cosa que administrar las contradicciones del presente.
Ayer hizo diez años que Jordi Pujol emitió un comunicado en el que afirmaba haber tenido dinero fuera del país sin haberlo declarado. Incluso sus más próximos colaboradores le retiraron los atributos que le correspondían como expresidente. Había caído el ídolo moral de varias generaciones de catalanes que le votaron, le admiraron y le soportaron. Que no se preocupe por lo qué dirá la historia de él. Docenas de libros le esperan todavía. Lo relevante no es lo que se diga sobre él, sino cuál ha sido el legado del movimiento nacionalista que él impulsó. El catalanismo político sigue muy vivo. Pero no hay nadie que enarbole hoy la bandera pujolista por mucho que sus más fieles seguidores la quieran identificar con la que pasea desde Waterloo Carles Puigdemont. Son otros tiempos.
Publicado en La Vanguardia el 26 de julio de 2024
Lo de Paris ha sigut molt fort.
Quina vergonya, quina decadencia, quina ofensa!
PRESUPUESTOS LEGADOS
Documento firmado por Rafael Simancas, Secretario de Estado de Relaciones con las Cortes y Asuntos Constitucionales.
Presupuesto para Catalunya año 2023,
2.276,418 Millones de €. Se ejecutaron 1.028,171. El 45%.
130 € per cápita catalán.
Presupuesto para Madrid año 2023
1.207,274 Millones de €. Se ejecutaron 2.558,469. El 212%
373 € per cápita madrileño.
————————————————-
El Presidente Pedro Sánchez pedirá al President Pere Aragonés los votos para investir a Salvador Illa, President de la Generalitat. También para los Presupuestos Generales de España de 2025.
El President Pere Aragonés NO debe decirle que España ó el Gobierno de turno nos roba. Que el Presidente Sánchez consulte la RAE y ponga el adjetivo más adecuado.
Y hacerle las siguientes preguntas entre otras.
1 – ¿Cómo piensa compensar los continuos incumplimientos de tantos años anteriores?
2 – ¿Pasados ya 6 meses de 2024, como está el cumplimiento de 2024?
3 – ¿Habrá un compromiso total en el cumplimiento a partir de ya?
4 – ¿Desde ahora al calcularlos, se tendrá en cuenta el 16 % de la población, el 21 % del PIB y el 26 % de
las exportaciones?
5 – ¿Se seguirá incumpliendo el Estatuto de Catalunya, aprobado por el Congreso, el Senado y el
Parlament?
6 – ¿Se terminará el Eje Mediterráneo, que tantos beneficios aportaría a Andalucía, Murcia, Levante, Catalunya…….es decir; a una importante zona de la economía Española?
Recordarle que el año de mejor cumplimiento de inversiones fue el PP con el 59 % y el PSOE con solamente el 52 %.
Este es el LEGADO ECONÓMICO, sector importantísimo que hemos recibido hasta hoy. Que influye directamente en el desarrollo Industrial, Comercial, Social, de Educación, de Sanidad, Pensiones……
en lo que los políticos denominan enfáticamente Estado del Bienestar y Progreso.
Un gran fracaso de los políticos españoles en general y de los catalanes en particular. A los que nosotros votamos.
«Avui solament soc capac de manifestar el meu descontentament, no se que proposar. En tot cas, que cal retornar a la politica, pero potser fora dels partits»
Fragment del article de Tica Font a Catalunya Cristiana 2336 del 14 de juliol.
La partitocracia ha petat el sistema.
Pujol sabia que era la Catalunya carolingia. Puigdemont sembla que ni se n’ha assabentat. Mi haber estat alcalde Girona li ha servit. D’allà on no n’hi ha no en raja