El responsable no es el VAR sino el colegiado extremeño Gil Manzano que hizo más caso del nuevo artefacto justiciero que de los gestos de normalidad de Pere Pons, jugador del Girona, que no se dio cuenta de que fue objeto de un codazo hostil por parte de Lenglet. Gil Manzano es persona propensa a expulsar jugadores del Barça. En los 19 encuentros que ha arbitrado ha expulsado a cinco azulgranas. Ha dirigido 21 duelos en los que jugaba el Madrid y nadie ha recibido una roja. El VAR será un instrumento que protegerá la discrecionalidad arbitral por otros medios. El VAR es neutro. Lo que no son neutros son los árbitros.
El Barça tiene que construir un sistema defensivo mejor y Valverde ha de revisar su tendencia a las rotaciones prematuras. Los experimentos pueden ser necesarios pero sólo cuando un partido o eliminatoria están encaminados. Y no al revés.
Pero lo más escandaloso de este comienzo de temporada son las tormentosas relaciones entre Luis Rubiales , presidente de la RFEF, y Javier Tebas , el presidente de la Liga. No pueden enzarzarse en un debate tabernario en una tórrida noche del postverano sobre los horarios y sobre un planeado Girona-Barça en Miami en el mes de enero. Alguien tiene que aportar un poco de inteligencia teniendo en cuenta los derechos de los aficionados.
La TV es muy importante para generar recursos. Pero no puede alterar la vida laboral de un país. No es de recibo que esta semana se jueguen cuatro partidos de Liga a las diez de la noche. ¿Nadie trabaja aquí? ¿No se pueden juntar partidos a una misma hora razonable aunque vaya en contra de los intereses de la televisión? Rubiales y Tebas se parecen a aquellos protagonistas de las películas del Oeste con la ley del más fuerte como lema. Un cierto autoritarismo les homologa. La Liga es la única competición europea que juega de viernes a lunes, cuatro veces a la semana. Es la TV la que manda en contra de la armonía y la salud ciudadanas. Ah!, y más pausas de hidratación cuando el calor es insoportable.
Publicado en Mundo Deportivo el 25 de septiembre de 2018
Hablar de futbol es entrar en lado oscuro y ausente de todo raciocinio.
Sr.Foix: lo de Tebas y Rubiales ya es un culebrón en toda regla…
Si según usted, el codazo fue hostil, porqué quejarse del árbitro y de la expulsión del jugador Lenglet. Luego en el último parágrafo cita usted, así lo interpreto que la TV no puede alterar la vida laboral de un país. ¿Alterar la vida laboral de un país? y lo argumenta. Pero…me pregunto, somos ya mayorcitos, sabremos escoger aquello que no altera nuestra vida laboral y ninguna otra que altere, por ejemplo, nuestra vida emocional, ni intervenga en nuestras ideas, ¿no?
Escribe usted también que la TV es la que manda en contra la armonía, totalmente cierto y no únicamente en el futbol admirado señor Foix, también tristemente en la política y en los sentimientos, el mayor exponente lo tenemos en nuestra casa, Catalunya. En cuanto afectar a la salud, todo dependerá de la salud mental de cada televidente.
Y…referente al Barça- Girona, dígame suspicaz, lo aceptaré, el resultado, a mi criterio, estaba cantado, así lo refleje en mí quiniela, pero no acerté los suficientes, pues quizás me estaría dirigiendo a usted, pues lo seguiría igual, desde las Seychelles.