El Barça de Xavi necesitaba un parón para reposar anímicamente tras los resultados agónicos después de perder con el Donetsk en Hamburgo. Está vivo en la Champions, a cuatro puntos del líder, el Girona, y a dos del Real de Florentino. Aspira a todos los títulos pero con ánimo cansino y quejoso.
Cargar contra la prensa es el último recurso de un profesional. Señalar a los medios no silencia los silbidos que se escucharon tímidamente el domingo en Montjuïc. Cruyff se inventó el entorno como cortina dialéctica para evitar críticas. Cada cual expulsa responsabilidades cuando las cosas se ponen feas. Xavi tiene el afecto y la complicidad de la afición barcelonista y no necesita buscar fantasmas donde no los hay. La prensa es libre de valorar la marcha del equipo y los jugadores tienen que pasar por encima de la hostilidad de las críticas.
Catorce jugadores del Barça se han marchado con sus selecciones y Xavi tendrá ocasión de pensar cómo pone al equipo en modo ganador. Ya ha vuelto Pedri y Lewandowski ha encontrado el camino del gol. De Jong ha superado la lesión. Xavi tendrá que pensar cómo administra la brecha generacional entre veteranos con talento y experiencia y jóvenes adolescentes que han demostrado su valía, sorprendidos de jugar en el primer equipo.
El incidente entre Lewandowski y Lamine es una anécdota sin importancia si se tiene claro que en el campo no hay paternalismos ni infantilismos. Si no mejora la calidad del juego, si los resultados flaquean, si no hay títulos, será el público el que pedirá cuentas a Xavi y a Laporta. Es la implacable ley de los resultados.
Publicado en Mundo Deportivo el 14 de noviembre de 2023
El periodisme esportiu es de lo mes cutre. Tambe es veritat que la majoria de esportistes no son massa lumbreras.
El Sr. Foix cuando comenta cosas del mes que un club se pone en modo hazañas belicas. I aixo ni es bo ni es normal!
El senyor Foix es fluix parlant de futbol i encara ho son més els seus collegues esportius. Cruyff ja els hi va parar els peus i Xavi ha estat massa permissiu amb una colla de negats que sols volen vendre notícies encara aue perjudiquin al. Club.
Potser amb menys i millors periodistes esportius a tots i al Barça els hi anitia millor.