El cambio de los británicos

El laborista Keith Starmer ha infringido una derrota humillante a los conservadores de Sishi Sunak.

Los ingleses son en general conservadores porque piensan que tienen mucho que conservar. Es el país de los anticuarios que van exhibiendo las cosas viejas, libros antiguos, relojes que llevan siglos marcando las horas, muebles de todas las épocas, sombreros exóticos, ropas gastadas y parientes lejanos en cualquier lugar de la Tierra.

El Partido Conservador representa bastante bien los instintos más profundos del país. Pero cuando los británicos tienen la sensación de que el partido natural de gobierno ha perdido el equilibrio y la naturaleza empírica de las cosas, simplemente lo echan para que pase por un reformatorio y se deje de teorías y abstracciones sentimentales.

Una interpretación apresurada de la humillante derrota de los conservadores tras 14 años ininterrumpidos en el poder es que el grupo de las élites supremacistas e iluminadas que salieron de Eton y se confabularon en Oxford optaron por la idea romántica de abandonar una Europa en la que ya no eran los árbitros.

Aquella huida de la Unión Europea rompió con el principio pragmático y realista de los gobiernos británicos desde los tiempos imperiales. Los hechos confirman que aquel grupo reducido de agitadores y mentirosos empujó al país a la irrelevancia política y económica. El que fue jefe del servicio de contrainteligencia, el célebre MI6, sir Alex Younger, comentaba este jueves que el Brexit “nos ha marginalizado y el único país satisfecho por haber abandonado Europa es la Rusia de Putin”.

Las élites del Partido Conservador han caído de nuevo en la trampa del menosprecio histórico hacia la Europa continental. Y les ha salido mal la jugada porque antepusieron el nacionalismo emocional al realismo de una Europa a la carta en la que se les permitió no estar en el euro ni en Schengen y dejar de ser contribuidores netos a la Unión.

Los laboristas de Keir Starmer no han querido echar con empujones a Rishi Sunak. Han dejado que él solo se hundiera en la irrelevancia. No se planteará por ahora el regreso a la UE, pero se trazarán nuevos puentes rotos por el Brexit. Un dato interesante: mientras Europa gira a la derecha y derecha extrema, los británicos entregan su conservadurismo antropológico a la izquierda laborista. La democracia no consiste solo en formar gobiernos sino en echarlos.

Publicado en La Vanguardia el 5 de julio de 2024

 

  5 comentarios por “El cambio de los británicos

  1. Semblantment el que ens passa aquí on els il·luminats també ens treurien de la UE sense ni fer-ne’n menció.

  2. I un cop més, els anglesos ens han donat la lliçó del relleu ràpid de Govern: ahir hi va haver eleccions; aquest matí el Primer Ministre ha presentat la seva dimissió al Rei; a les 13:00 hores el cap del partit laborista ja tenia l’encàrrec de formar govern; i poc desprès entrava al 10 de Downing Street, on aquesta nit ja hi dormirà.

    Com aquí, vaja…

  3. Documentado y razonado articulo del Sr. Foix.
    La prepotencia y el mirar por encima del hombro de los ingleses les ha traido hasta aqui.
    Merecido y triste.

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