Redefiniciones de la izquierda

La izquierda italiana ha cambiado de alianzas, de nombres y de líderes. Ha estado dentro y fuera del gobierno con fórmulas complejas que han agrupado a ex comunistas, radicales y socialistas de el Olivo, de la Margherita y de cuantos residuos del debacle provocado por la caída del comunismo en Europa en los años noventa.

Walter Veltroni, alcalde de Roma, ha ganado un referéndum para que quien quisiera votar se declarara a favor o en contra de un nuevo partido, el Partido Democrático, que vendría a ser un crisol de fuerzas de izquierdas y progresistas que mirarían más hacia el centro que hacia los extremos.

Pasqual Maragall ha dedicado esfuerzos y discursos a esta causa. El ex president de la Generalitat considera que la izquierda clásica necesita reciclarse y mirarse en un espejo mucho más amplio que, sin perder sus convicciones ideológicas, piense más en los ciudadanos que en los partidos. Uno de los éxitos de los tres mandatos de Tony Blair, hasta que le llegó la hora fatal de Iraq, fue el de no querer cambiar el país sino cambiar el partido.

Veltroni viene a proponer una nueva formación que guarde una cierta semejanza con el Partido Demócrata de Estados Unidos. Un partido transversal, aglutinador de creencias y posiciones plurales, que tenga como objetivo rendir cuentas con el electorado antes que con su propio partido.

Esta americanización de la política europea se está imponiendo por la vía de los hechos.
Nicolas Sarkozy se ha comido con guisantes a la izquierda francesa en los últimos meses. El futuro de la presidencia Sarkozy está por ver. Sus impulsos, prisas y volteretas inesperadas desconciertan al personal. Pero el hecho cierto es que el partido socialista está viendo cómo Sarkozy le ficha a figuras emblemáticas y no tiene un líder indiscutible para afrontar la travesía del desierto que le espera.

En Alemania, Ángela Merkel ha desconcertado a la socialdemocracia hasta el punto que está sirviendo en un gobierno democratacristiano en espera de rehacer el discurso y buscar un líder.

Gordon Brown parecía seguir la senda de Tony Blair encandilando al personal pero ha cometido el error de no adelantar unas elecciones que todavía podía haber ganado.

En España, qué les voy a decir, no está escrito en ninguna parte que Zapatero vuelva a ganar las elecciones. En buena parte, porque ha querido cambiar el país sin tener en cuenta a la gente que vivimos en él.

  8 comentarios por “Redefiniciones de la izquierda

  1. El problema reside en que hoy en día no luchamos contra una dictadura, luchamos contra una acomodación, luchamos contra unos políticos burocratizados y aposentados.

    J.Vilá.

  2. Bartolomé:Espero que, aunque difícil, no sea imposible.La esperanza es lo último que debemos perder.Hemos superado tiempos más difíciles,no vamos a poder con estos?.Animos a todos!Un saludo

  3. Africa@, La política hoy en día se nutre de cuadros de los partidos, de gente que hace meritos,( otros lo llaman hacer pasillos), durante años a la espera de un destino. Si ha de haber una redifinición, una regeneración habrá que buscar algo más que ideas, habrá que buscar personas que sepàn llevarlas a término y como bien dices va a ser difícil. Comparto por último la opinión de francis black,la izquierda intelectual se ha quedado sin espacio, principalmente por falta de renovación.

  4. Sr Foix: Gente preparada y sin ataduras,como bien dice Bartolomé, supongo que las hay.Lo más probable
    es que, viendo como està el panorama político,no sientan el mínimo interés en participar del circo que tienen montado(con todos mis respetos por el circo auténtico!)Un saludo

  5. Yo veo la cuestión de otro modo, hay que renovarse, sí, pero la izquierda que siempre había estado a la cabeza de las innovaciones sociales y políticas a perdido comba, les falta precisamente aquello que antes tenía de sobre, intelectuales y gente preparada, ahora al comaprtir el poder con la derecha tienen más de lo mismo, funcionarios que solo piensan en que no les quiten su silla. El reto y ya lo ha dicho Bartolomé es encontrar personas para esa renovación.

  6. Pascual Maragall no es muy de mi agrado, me parece que no ha digerido bien su marcha de la política, si es que se ha marchado alguna vez. Refundar la izquierda suena bien, otra cosa es saber hacerlo y no veo yo gente que esté por la labor ni preparados, lo veo difícil, muy difícil.

    E.Dalmau.

  7. Para mi el problema de la izquierda es que se sigue considerando moralmente superior a la derecha , otro error es que hay mucha clases populares que siendo en principio de izquierdas no se ven representados por una politica social que ayuda mucho mas a la inmigración que a ellos y de eso viven muchos partidos de nueva creación que son de una derecha popular , espacio que aqui ocupa el PP .

    La izquierda intelectual tiene poco espacio .

  8. Sr.Foix: Pascual Maragall está en lo cierto, renovarse o morir, pero hay que renovarse de verdad y para eso se necesita gente preparada, sin vicios ni ataduras, el reto es encontrar esas personas para iniciar el proyecto.

Comentarios cerrados.