Lluís Foix

Los socialistas madrileños

El president Tarradellas solía preguntar de vez en cuando, al final de su vida, cómo estaba la Federación Socialista Madrileña. Sabía que las luchas entre los socialistas madrileños habían causado grandes sustos a la República por las discrepancias de fondo entre el sector de Largo Caballero y el de Indalecio Prieto y Julián Besteiro. En…

Aquel triste 6 de agosto de 1945

Fue un día triste y miserable aquel 6 de agosto de 1945. La primera bomba atómica descendía sobre la ciudad de Hiroshima levantando aquel gigantesco hongo de destrucción masiva, de muerte y tinieblas, sobre la ciudad japonesa. El proyecto Manhattan, dirigido por el científico Oppenheimer, se experimentaba por primera vez en la historia de la…

Un nuevo populismo

Cuentan que James Joyce, cansado del debate nacionalista con sus compatriotas irlandeses, les sugirió que ya que no podían cambiar de país sí que podían cambiar de tema. Es difícil evadirse de la democracia de opinión y sustituirla por la democracia deliberativa, argumentada, respetuosa con las opiniones ajenas. Tras pasar unos días en la Castilla…

Desde tierras salmantinas

La prohibición de los toros por el Parlament de Catalunya me pilla por tierras salmantinas, calor vertical y rotundo, entre el Duero y el Tormes, divisando desde las solitarias autovías algunas reses que pertenecen a ganaderías de renombre. Los diarios madrileños y locales han abierto con la votación que se iba a perpetrar en el…

Mentiras afganas

Hemos entrado en el periodismo de investigación de alta tecnología. Ya no son los periodistas los que buscan datos relevantes para conocer un aspecto de la verdad. Son los informáticos y los que dominan los códigos cifrados o descifrados de la red los que pueden llegar al corazón de las tinieblas. La filtración de 92.000…

La España imposible

Toro (Zamora) La Tierra de Campos es ahora un inmenso rastrojo que parece no tener límites. Algunas pinedas y encinares rompen la monotonía del sol perpendicular. Campos y más campos. Un castillo en una loma y una iglesia descomunal en un pueblo de cuatro casas. Por aquí pasó el infante Carlos, un emperador niño, en…

El Duero bañado de banderas

El Duero, amable y sencillo, verdoso o terroso, surca la españolidad castellana, ajeno a las banderas que todavía cuelgan en cientos de balcones rememorando la gesta de la Roja en Johannesburgo. Se exhiben en todas sus modalidades. Con toro negro y rabioso, con el escudo oficial, con frases ocurrentes, con proclamaciones de españolidad como la…