Una potente bomba de ETA ha congelado el discurso político alrededor del plan Ibarretxe, de la posibilidad de una tregua, de los acercamientos entre los partidos, de negociaciones, acuerdos y reformas en la organización territorial de España. El coche bomba llevaba cuarenta kilos de dinamita. Su explosión se escuchó en un radio de diez kilómetros…