Una vida breve es compatible con la genialidad. Mozart murió a los 35 años, Franz Schubert, a los 31; Jaume Vicens Vives, a los 50; Prat de la Riba, a los 46; Johannes Vermeer, a los 43, y William Shakespeare, a los 52. Hay muchísimos más que se fueron jóvenes dejando legados inmateriales que perduran.…