El mismo día que las calles de Barcelona reunieron a 160.000 personas en solidaridad con los refugiados, el probable vencedor de las elecciones holandesas del 15 de marzo, el xenófobo y populista Geert Wilders, afirmaba que “hay mucha escoria marroquí en Holanda que hace que las calles sean inseguras”. Son dos caras de la realidad…